Ayer se reunió lo mejor de España en Ferraz.
La solicitud oficial de la concentración, al parecer, estaba registrada por una marca blanca de VOX, con la intención torticera de aprovechar en su beneficio la legítima oposición del pueblo español a la ilegal amnistía preparada por Perro Sánchez.
Pero el hecho cierto es que a esa convocatoria original no acudió allí ni la centésima parte de los asistentes. La inmensa mayoría acudieron a la convocatoria hecha por Alvise Pérez, donde la causa de la protesta es el indecente uso, por el tirano de turno, de las fuerzas policiales, que en su mayoría acceden a obedecer órdenes ilegales.
Eso fue lo que hicieron los policías el día anterior, utilizando una violencia absolutamente injustificada, contra ciudadanos pacíficos.
Resulta patético ver que los sindicatos y asociaciones policiales, admitiendo la ilegalidad de lo ocurrido, para no perder afiliados atribuyen toda la culpa a quien dio las órdenes, exculpando a los agentes que las cumplieron.
Falaz argumento, porque si el comportamiento de los agentes cumpliendo las órdenes fue legítimo –como dicen los sindicatos-, es porque la orden lo era. Y si no lo era la orden, tampoco lo fue el comportamiento de sus afiliados. Porque los agentes que cumplen órdenes ilegales tienen –según esas leyes que juraron cumplir- responsabilidad personal en ello. Perjurio, dice el diccionario.
Y ésta es la verdadera causa de todos los males de España: el cumplimiento por los policías de órdenes ilegales.
La existencia de un puñado muy nutrido de psicópatas criminales en los cargos relevantes de los poderes legislativo, ejecutivo y judicial (la situación actual), sería inofensiva, si no contasen con 200.000 pistolas para imponer su tiranía a la población.
Esas pistolas las ponen al servicio de la tiranía los agentes que eligen obedecer órdenes ilegales. Por desgracia, una inmensa mayoría, que más que canallas (que también) son idiotas, porque la paz temporal con su jefe no vale nada, cuando al final de la jornada laboral se incorporan al grupo de los tiranizados, y tienen que rendir cuentas por ello a sus familias y amigos.
En mi opinión, este 7 de noviembre ha sido un éxito. A los políticos (voxeros incluidos) les ha salido la criada respondona, y el pueblo coreó consignas donde toda la casta queda malparada.
Para la policía tuvo que ser una jornada dura. Muchos agentes han visto las orejas al lobo, y saben que al terminar la jornada, las palmaditas en la espalda de los canallas de sus jefes no les valen de nada, si sus familias y amigos les pasan la factura. Porque no hay paz sin justicia.
Lo más importante ocurrido ayer, 7 de noviembre de 2023, es que se quitaron muchas caretas, y al poder psicopático y genocida le empezaron a temblar las piernas, viendo que sus pistolas podrían dejar de funcionar.
A careta quitada, a partir de ahora volveremos a vernos todos las caras: ciudadanos, tiranos y esbirros. No hay más opciones.
Elija usted, pero no olvide que quien elija el bando equivocado puede verse compartiendo cadalso con los tiranos.
Mi hipótesis es que el asunto Ferraz-amnistía ha sido cuidadosamente diseñado y desarrollado por expertos en ingeniería social al servicio de los que mandan en Sánchez (y el resto de los líderes de partidos parlamentarios) con el doble fin de que aceptemos el reforzamiento jurídico del dictador y la venida de la República Federal Española que Franco les impidió hace un siglo. Ojo a los violentos infiltrados y a los disidentes controlados influencers. Al tiempo. Somos mucho más estúpidos, manipulables y sectarizables de lo que estamos dispuestos a aceptar