Uno de los personajes más miserables y asquerosos que hemos podido escuchar en los últimos años es a Yuval Harari, asesor de Klaus Schwab en el Foro Económico Mundial.
Este personaje ha destacado siempre por hacer afirmaciones y declaraciones en las que siempre ha puesto en un último plano al ser humano, siempre por debajo de máquinas y avances tecnológicos.
Firme defensor de la despoblación mundial, para este tipo, que vivamos miles de millones de seres humanos en el planeta es un serio e innecesario problema cuando, bajo su punto de vista, podríamos ser sustituidos por máquinas.
Pero como en este mundo impera la estupidez, sus intervenciones todavía son aplaudidas por muchos que deben pensar que aquí sobra todo el mundo, menos ellos. La absurda forma de ver la vida que tienen muchos al pensar que los males los van a sufrir siempre los demás y no ellos.
Y a todo esto, el tipejo Harari es admirado por muchos incluso cuando hace declaraciones como estas: «¿Para qué necesitamos a los humanos? Por el momento, nuestra mejor solución es mantenerlos felices con drogas y juegos de computadora».
¿Para qué necesitamos a ciertos humanos? sería la pregunta. Pero es que ni lo esconden, es que te lo arrojan a la cara.
Me paso la vida apuntando por las redes a que este engendro es un androide híbrido, y nadie me hace caso.