Una de las cosas más hilarantes, estúpidas y miserables que hemos visto a lo largo de la farsemia fue aquello de los «asintomáticos». Es decir, aunque alguien estuviera perfectamente, podría ser asintomático y contagiar a la gente. Ese término provocó de todo: ingresos hospitalarios que acabaron con la vida de las personas por los «protocolos», colas interminables para hacerse test en las farmacias durante la Navidad para evitar contagiar a los abuelos… En fin, la locura absoluta que mató a gente y que destrozó familias gracias a las mentiras de unos y a la estupidez de otros.
Pero el término, así como otras farsas, les funcionó y cuando a esta gentuza le funciona algo lo utiliza hasta la saciedad. Ahora nos encontramos ante otra farsemia: la climática. Pues aunque no se lo crean aquí también han encontrado acomodo para la palabreja.
Y ustedes se preguntarán cómo. Muy fácil, estamos en pleno mes de julio, imaginen que, a pesar de ser julio, se encuentran con que en un país, por ejemplo Irlanda, hace frío. ¿qué decir entonces para seguir vendiendo la farsemia climática? Pues que Irlanda sufre un calentamiento global asintomático. Así, como lo leen.
Y el Profesor Luke O’Neill, que es quien lo ha dicho, se quedará tan ancho. Él y los que le paguen. ¿Y saben por qué? Porque todavía habrá imbéciles que se lo crean. Como aquellos que hacían colas de dos horas delante de una farmacia en pleno mes de diciembre y cuando se hacían el test se sorprendían porque les daba positivo después de haber estado pasando frío.