Artículo de Alfonso de la Vega
En un sótano del Vaticano y discretísima ceremonia privada celebrada gracias a los poderes otorgados por la Minucia Supplicans, el controvertido padre Martín SJ considerado amoroso apóstol patrono de invertidos ha realizado la bendición de la austral pareja formada por Jorge Mario Bergoglio, obispo de Roma, y Víctor Trucho Fernández, prefecto del Dicasterio para la Doctrina de la Fe y célebre autor del famoso best seller, «El beso o el cardenal que besa es que besa de verdad».
Un acto que no por esperado por unos y temido por otros deja de suponer un reconocimiento a la dilatada relación entre ambos próceres eclesiásticos argentinos, y celebrado en momento oportuno antes que lo mismo hubiera tenido que hacerse in articulo mortis.
A la ceremonia, de la que aún no tenemos imágenes porque los indiscretos móviles fueron oportunamente requisados, asistió una representación de la mafia de San Galo, reconocida mecenas de ambos, junto a un reducido grupo de personas escogidas entre las aficionadas al morbo y consumidoras compulsivas de papalatría posconciliar.
Se ignora quien pilló la «exclusiva» y si el dinero así conseguido pasará a engrosar el óbolo de San Pedro, varios millones menguado tras las aventuras especulativas londinenses y en paraísos fiscales que le han costado al cardenal Becciu una condena a cinco años y medio de cárcel.