Cada vez es más difícil de creer y de asimilar lo que sucede en este país: el emprendedor, el que se juega su dinero para crear empresas y generar empleo está mal visto y encima tiene que aguantar que el vividor, el subvencionado y el vago le intente dar lecciones.
En estos últimos días, el conocido empresario del mundo del motor, Ángel Gaitán, publicaba un vídeo en el que explicaba los grandísimos problemas que estaba teniendo para contratar personal, puesto que no encontraba gente que quisiera trabajar ya que preferían vivir de cualquier «paguita» que le diera el estado. Algo que todos sabemos que está sucediendo en muchos sectores.
Imaginen, con todo lo que han tenido que pasar los empresarios de este país, con la farsemia, con lo de Ucrania e infinidad de cosas más, todavía tienen que aguantar que un sujeto como Maestre les ande dando lecciones.
Como es normal, ante este burdo intento de manipulación, Ángel Gaitán respondía a Maestre con otro vídeo en el que detallaba en qué consistieron esas ayudas a las que un pelota subvencionado llamaba «paguitas».
Manda narices que en este país haya que aguantar este tipo de comentarios de alguien que nunca se ha jugado nada. De alguien que nunca ha invertido, que no ha generado empleo en su vida y que lo único que ha hecho es arrimarse al sol que más calienta para trincar sin demasiado esfuerzo.
No crean que Maestre, y toda la fauna que es como él, no saben por todo lo que están pasando los empresarios en España, lo saben perfectamente. El problema es que si dijeran la verdad y denunciaran, probablemente dejarían de comer calentito y sin esfuerzo, que es lo que están haciendo ahora.
Si aunque no denuncien, por lo menos callaran, la cosa tendría un pase. Pero que encima haya que aguantarles faltas de respeto como estas, no tiene perdón de Dios.