El caso de Mónica, una menor de 16 años, ha conmocionado a la comunidad educativa en España tras las graves acusaciones de acoso hacia ella por parte de algunos de sus profesores en el British Council de Pozuelo de Alarcón. Según la demanda civil presentada por su familia, las presuntas conductas discriminatorias y vejatorias por parte del personal docente derivaron en un cuadro de estrés agudo, que desencadenó en la menor un trastorno de anorexia nerviosa y afectaciones musculoesqueléticas. El informe elaborado por el psiquiatra José Cabrera, experto en medicina legal, describe un impacto físico y psicológico significativo en la adolescente, quien habría tardado más de un año en recuperarse parcialmente.
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Los problemas comenzaron en 2022, cuando Mónica intentó alertar sobre el acoso que sufría una amiga, y al no recibir apoyo de sus profesores, comenzó a ser objeto de amenazas y presiones. Como relata la madre de Mónica, los docentes llegaron a sugerirle que “este colegio no es para ti” y que incluso podría enfrentar problemas académicos si continuaba. Esto provocó un deterioro en la salud de la menor, quien tuvo que ser ingresada en un centro hospitalario debido a la pérdida de peso y problemas óseos, que pusieron en riesgo su vida.
La demanda presentada por la familia ante el Juzgado de Primera Instancia de Pozuelo reclama una indemnización de 35,489 euros por los daños causados, de los cuales 22,575 euros corresponden a daños físicos y psicológicos derivados del trastorno de anorexia y el resto a un trastorno adaptativo crónico. El caso fue inicialmente investigado en la vía penal, pero la falta de actuación oportuna y las huelgas judiciales provocaron su archivo. La familia presentó una queja ante el Consejo General del Poder Judicial, denunciando la falta de protección a la víctima por parte del órgano judicial responsable del caso.
Por su parte, el British Council ha emitido un comunicado en el que afirma que el bienestar de sus estudiantes siempre ha sido una prioridad y que aplican una política de tolerancia cero frente al acoso, investigando cualquier caso de manera minuciosa y respetando la privacidad de los menores implicados.