Alberto González Amador, pareja de la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, ha solicitado la presencia de Pedro Sánchez, presidente del Gobierno, y de Félix Bolaños, ministro de Presidencia y Justicia, en un acto de conciliación previo a la presentación de una querella por supuestas injurias y calumnias. La razón detrás de esta acción legal radica en las declaraciones de Sánchez, en las que González Amador fue calificado como «delincuente».
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El equipo legal de González Amador ha presentado formalmente estas solicitudes en los juzgados de Madrid, argumentando que las palabras de Sánchez vulneran los derechos fundamentales de un ciudadano español, en referencia a la dignidad y al respeto. Como parte de la conciliación, González Amador solicita una compensación económica: 100.000 euros de Pedro Sánchez y 50.000 euros de Félix Bolaños.
Las declaraciones que han motivado esta acción legal tuvieron lugar el 17 de octubre, después de que se revelara la imputación del fiscal general del Estado, Álvaro García Ortiz, por un presunto delito de revelación de secretos. En esa ocasión, el presidente Sánchez hizo referencia a González Amador durante una rueda de prensa en Bruselas, calificándolo como «delincuente confeso».
No es la primera vez que González Amador emprende acciones legales contra miembros del Gobierno. Anteriormente, llevó a la ministra de Hacienda, María Jesús Montero, a un acto de conciliación por declaraciones realizadas en marzo en las que se refirió a la presidenta madrileña como residente de un piso pagado con fraude fiscal. Tras la ausencia de Montero en ese acto, González Amador decidió interponer una demanda ante el Tribunal Supremo.