Un video clasificado, recientemente mostrado a miembros del Congreso de Estados Unidos, ha generado gran expectación al revelar imágenes de un fenómeno aéreo no identificado (UAP, por sus siglas en inglés). Las imágenes, captadas por un dron militar estadounidense en una zona de conflicto en el Medio Oriente, muestran un objeto esférico que parece interactuar de manera inusual con un misil Hellfire disparado desde el dron.
Según fuentes familiarizadas con el material, el video muestra cómo el misil, diseñado para atacar objetivos terrestres con alta precisión, se desvía de su trayectoria tras un encuentro con un objeto metálico en forma de orbe que se mueve a gran velocidad. Este objeto, descrito como un esfera de aproximadamente un metro de diámetro, no muestra señales visibles de propulsión, lo que ha desconcertado a los expertos militares y científicos que han analizado las imágenes.
El metraje, presentado en una sesión a puerta cerrada ante legisladores estadounidenses, forma parte de los esfuerzos del Pentágono por esclarecer los crecientes reportes de UAP en los últimos años. Aunque no se ha confirmado la naturaleza del objeto, su comportamiento errático y su aparente capacidad para evadir o interactuar con armamento avanzado han avivado el debate sobre la posible existencia de tecnología desconocida.
Testigos de la presentación señalaron que el video es “impactante” y plantea más preguntas que respuestas. Algunos legisladores han instado a que se desclasifique el material para permitir un análisis más amplio por parte de la comunidad científica, mientras que otros abogan por mantener la confidencialidad debido a las implicaciones para la seguridad nacional.
El incidente ha reavivado el interés en los UAP, especialmente tras reportes previos de avistamientos por parte de pilotos militares. Aunque no se ha llegado a ninguna conclusión definitiva, el Pentágono continúa investigando estos fenómenos a través de su Oficina de Resolución de Anomalías en Todos los Dominios (AARO), creada para estudiar y catalogar incidentes relacionados con objetos aéreos no identificados.
Por ahora, el misterioso orbe sigue siendo un enigma, dejando a expertos y legisladores intrigados por lo que podría significar para el futuro de la seguridad y la exploración tecnológica.