En 1931, en el pequeño pueblo de Ezquioga, en Vascongadas, se reportaron una serie de apariciones marianas que captaron la atención de miles de personas. Entre los mensajes transmitidos por los videntes destaca una profecía atribuida a la Virgen María que ha generado debate y especulación durante décadas. Según esta visión, la Virgen advirtió sobre un futuro turbulento para España, con un mensaje que resuena por su precisión y dramatismo: «Para el próximo siglo… Volverá el comunismo, el Rey volverá a ser destronado, habrá una Tercera República y otra guerra civil, corta pero sangrienta».
Las apariciones de Ezquioga ocurrieron en un momento de gran inestabilidad política y social en España. En 1931, la Segunda República Española acababa de instaurarse tras la abdicación del rey Alfonso XIII, y el país estaba profundamente dividido entre republicanos, monárquicos, socialistas, comunistas y sectores conservadores, especialmente la Iglesia Católica. En este contexto, las apariciones de la Virgen en Ezquioga, un pueblo de la provincia de Guipúzcoa, atrajeron a multitudes que buscaban consuelo espiritual y respuestas ante la incertidumbre.
Los videntes, principalmente niños y jóvenes campesinos, afirmaron haber visto a la Virgen María, quien les transmitió mensajes de advertencia y llamadas al arrepentimiento. Aunque la Iglesia Católica nunca reconoció oficialmente estas apariciones, el fervor popular fue inmenso, y los mensajes se difundieron rápidamente, alimentando tanto la fe como la controversia.
El mensaje profético citado es uno de los más impactantes atribuidos a las apariciones de Ezquioga. Según los videntes, la Virgen predijo que, en el siglo siguiente (es decir, el siglo XXI), España se enfrentaría una serie de acontecimientos dramáticos:
- El retorno del comunismo: La profecía advierte sobre un resurgimiento de ideologías comunistas, un término que en 1931 evocaba temor en los sectores conservadores debido al auge del socialismo y los movimientos obreros en Europa, así como la reciente Revolución Rusa.
- La destitución del Rey: La mención de que «el Rey volverá a ser destronado» resulta particularmente intrigante, ya que en 1931 la monarquía ya había sido abolida con la proclamación de la Segunda República. Esto sugiere que la profecía anticipaba un retorno de la monarquía en España, seguido de una nueva caída.
- La Tercera República: La profecía señala la instauración de una Tercera República, lo que implicaría el fin de la monarquía restaurada tras el franquismo (en 1975, con Juan Carlos I). Este punto ha alimentado especulaciones sobre un cambio político radical en el futuro de España.
- Una guerra civil corta pero sangrienta: Quizás el elemento más inquietante de la profecía es la predicción de una nueva guerra civil, descrita como breve pero de gran violencia. La Guerra Civil Española (1936-1939) aún no había ocurrido en 1931, por lo que esta advertencia podría interpretarse como un presagio de aquel conflicto o como una predicción de un enfrentamiento futuro.
La profecía de Ezquioga ha sido objeto de interpretaciones diversas. Para los creyentes, el mensaje refleja una advertencia divina sobre los peligros de la desunión, el materialismo y la pérdida de valores espirituales. Para los escépticos, podría tratarse de una expresión de los temores colectivos de una época marcada por la polarización política y social, proyectados en un lenguaje apocalíptico típico de las visiones marianas.
En el contexto del siglo XXI, la profecía ha resurgido en algunos círculos, especialmente en momentos de crisis política en España, como el debate sobre la monarquía, el auge de movimientos populistas o las tensiones territoriales.
Las apariciones de Ezquioga no estuvieron exentas de polémica. La Iglesia Católica, aunque inicialmente toleró el fervor popular, acabó desautorizando las visiones, y muchos de los videntes se enfrentaron a críticas e incluso persecución. Sin embargo, el impacto cultural de Ezquioga perdura, y la profecía de 1931 sigue siendo un punto de referencia para quienes estudian las apariciones marianas o los fenómenos religiosos en España.