Felipe VI, Belén Esteban y Zapatero… ya no se preocupan ni de guardar las formas

Que los políticos y los representantes de las altas instituciones del estado nos han tomado el pelo siempre, no es ninguna novedad. Pero antes, al menos, lo hacían con cierto disimulo y se tomaban la molestia de intentar pasar lo más desapercibidos posible.

Pero no se sabe muy bien si es porque ahora son mucho más descerebrados, o nos han perdido todo el respeto y el miedo desde 2020, que la cosa es cada día más descarada y ofensiva.

Después de la firma del nombramiento de Sánchez como Presidente del Gobierno, los monárquicos más recalcitrantes quisieron seguir manteniendo las esperanzas en Felipe VI viendo en su gesto serio, mientras posaba con Sánchez, una especie de guiño al pueblo como para decirles que había un plan ‘B’. Nada más lejos de la realidad, Felipe firmaba sabiendo perfectamente lo que firmaba puesto que tanto él como Sánchez forman parte del mismo equipo agendista.

Lo que no sabemos es si esos monárquicos siguen manteniendo esa pequeña llama de esperanza viendo el comportamiento de su admirado monarca en los últimos días.

Y es que no parece demasiado serio que mientras las calles se inundan de protestas contra el gobierno, y contra lo que él «admirado» ha firmado, el Borbón se pase el día de fiesta en fiesta fotografiándose con toda clase de personajes como si no hubiera pasado nada.

Ayer presidía, junto con su esposa, la conmemoración del 25 aniversario del diario ‘La Razón’, un acto al que acudieron unas 3.000 personas entre las que se encontraban políticos como la ministro de Defensa, Margarita Robles, el líder del PP, Alberto Núñez Feijóo, los expresidentes del Gobierno, Mariano Rajoy y José Luis Rodríguez Zapatero, empresarios, comunicadores y artistas pero también algunos rostros famosos como Belén Esteban y Kiko Hernández.

Los dos excolaboradores de Sálvame se acercaron a los reyes y les pidieron hacerse una foto con ellos. Estos accedieron, demostrando que les importa bastante poco la imagen que puedan transmitir a los españoles y, sobre todo, a esos españoles, muchos de ellos ancianos, que estaban a esas mismas horas manifestándose en Ferraz debido a su preocupación por el futuro de España, algo que, evidentemente, tanto a Felipe VI, como a Letizia les importa bastante poco.

Ya no sabemos cuántas pruebas más son necesarias para demostrar a muchos lo que tenemos en la Jefatura del Estado. Pero la realidad es que, aunque cada vez menos, todavía le quedan defensores que justifican absolutamente todo lo que haga. Y para los que tenemos claro que el futuro de los españoles les importa entre poco y nada, solo les podríamos pedir que intenten disimular un poco.