viernes, noviembre 1, 2024
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Proselitismo ecológico teológico de Bergoglio

Artículo escrito por Alfonso de la Vega

Contra sus pintorescas teorías sobre la maldad del proselitismo, Bergoglio nos ha amenazado con una segunda parte de su pintoresco panfleto híbrido ateo panteísta  “Laudato si” para primeros de octubre, coincidiendo con los fastos de inauguración del cisma sinodal.

Lo del “Laudato si”, olvidando el famoso prudente aforismo de “zapatero, a tus zapatos”, era una aportación mohatrera a las aberrantes preocupaciones ecologistas de la élite plutocrática despiadada que le ha colocado en la sede de San Pedro. Nunca segundas partes fueron buenas salvo la de El Quijote o la de El Padrino y me temo que este oportunista recuelo tampoco lo vaya a ser.

Agradecimiento de los servicios prestados

Pero ahora, como aperitivo a partir del lunes 17 de este mes, Bergoglio participa en el filantrópico sarao sobre el clima y el aborto como forma de combatirlo del degenerado pederasta pro abortista, corrupto, satanista, vinculado al narcotráfico desde los tiempos de gobernador de Arkansas ex presidente Bill Clinton, de triste recuerdo y uno de los actuales ídolos pontificios quizás empatado con la chamánica Pachamama. Probablemente debe haber en esta colaboración con el degenerado político gringo algo de agradecimiento por los servicios prestados puesto que el demagogo político argentino le debe al corrupto y satanizado Partido Demócrata woke haber sido rescatado del ostracismo y aupado a la cucaña vaticana por una conspiración globalista instrumentada por la mafia homosexual de San Gallo.  

Esta vez no se digna ir en cuerpo mortal como su última aparición en las desoladas estepas de Gengis Khan y de los chamanes de la amanita muscaria. Su aportación al liberticida sarao clintoniano tendrá como tema en el que es gran experto, un asunto de muy elevado contenido teológico y apostólico evangélico: El cambio climático.

Vendedores de telas invisibles 

Estamos asistiendo a tiempos de impostura, confusión y mezcolanza inducidas y dirigidos a la lucrativa granjería de estafadores sin escrúpulos. Pero aunque el pretexto de la estafa sea novedoso la argucia mañosa es muy vieja.  Cuando veo a los enmucetados y jaleados impostores del cambio climático antropogénico no puedo menos de acordarme de los maravillosos apólogos del conde Lucanor.  Un catálogo escrito por un gran filósofo medieval como el Infante don Juan Manuel, sobrino del rey don Alfonso X El Sabio, en el que se estudia y muestra gran parte de la psicología humana. Una obra maestra de la Literatura española de todos los tiempos.

Cuando escuchas a Bergoglio pontificando urbi et orbi sobre materias ajenas a su conocimiento o cometidos evangélicos y espirituales pero a mayor granjería de la plutocracia anglojudía internacional no puedo menos que admirarme de la desfachatez de sus pintorescas teorías de quita y pon, según convenga, acerca del proselitismo.  Condenable cuando se retrataba de los heroicos misioneros españoles que con el evangelio en la mano intentaban domesticar a los antropófagos precolombinos, pero harto beneficioso y conveniente cuando se trata de engordar la cuenta de resultados de la plutocracia liberticida que le ha aupado al trono de San Pedro.  

En concreto cabe recordar aquí dos apólogos entre otros.

Primero, el cuento de las infelices e imprudentes perdices atrapadas en la red que se muestran compungidas porque su cazador llore mientras las recoge. Y no por su suerte como futura apetitosa vianda, hoy prohibida para el populacho, sino porque el viento le ha hecho entrar algunas motas de polvo en los ojos. Otra perdiz más astuta, acaso “conspiranoica”, se había librado de caer en la trampa. Muchos desavisados, víctimas irredentas de la propaganda globalista, piensan que les atrapan y matan por su bien, como cosa asaz filantrópica.

Pero muy especialmente cabe citar otro y más famoso apólogo: el de los vendedores de telas invisibles. Por ser muy conocido no hace falta insistir mucho en su descripción. La tela invisible del cuento pudiera asimilarse al famoso actual falsario Panel del clima. En todo caso muestra cual es la conducta adecuada para intentar sobrevivir con bien a los timadores. No aceptar chantajes del poder, pensar por sí mismos y tener la valentía de denunciarlo. 

Así lo están haciendo contra la censura y el chantaje dominantes o la imposición de una verdad oficial subvencionada, un importante grupo de científicos varios, ingenieros agrónomos, geógrafos … Y menos mal que no ha  solicitado pena de excomunión para los clásicos Hernández Pacheco, Dantín Cereceda, Del Cañizo, Roquero, Alcaraz…

No se entiende que se pueda hablar en serio de clima sin considerar aspectos tan decisivos como son las características geográficas. El clima se refiere a un lugar de la superficie terrestre y en el concurren tres órdenes de concausas: cósmicas, meteorológicas y geográficas. Lo del cambio del clima es cierto ya que así se ha producido en forma de pulsaciones climáticas durante los millones de años de la historia geológica de La Tierra, e incluso en etapas históricas conocidas. Pero desde luego no lo es que su causa sea antropogénica, salvo por la aplicación de las modernas armas bélicas, pues muchos de estos cambios se han originado antes de que se iniciara la actividad industrial y tienen que ver sobre todo con la variable actividad solar.

Sin embargo, promoviendo la interesada y falaz confusión con la preocupación ecológica y medioambiental, el cambio climático antropogénico se ha convertido en otra impostura de estafadores sin escrúpulos que posee gran capacidad de intimidación porque entre sus muchos y poderosos cómplices o caballeros de mohatra se encuentra nada más y nada menos que el presunto actual vicario de Cristo. El resultado en este caso no es solo la ruina de los timados sino también la negra suerte de las incautas perdices caídas en la red.

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