Por Alfonso de la Vega
En los últimos tiempos parece que don Felipe anda demasiado a la deriva. Y en vez de permanecer mejor callado hace ostentación de frivolidad, hipocresía, falta de empatía o profundo desconcierto moral y político. O bien no se deja asesorar o sus asesores parecerían reclutados por el enemigo o ser los mismos que los de su valido. De no realizar un buen desempeño para mantener la Corona además de censura o cortesanos alabanciosos que le jaleen sin duda necesitaría un buena propaganda con los mejores especialistas. De no ser unos Goebbels por lo menos un buen discípulo de Bernays, el Goebbels norteamericano.
Eduard Bernays era un sobrino de Freud afincado en Norteamérica y conocido por su famosa teoría de la Propaganda. Una palabra considerada peyorativa pero que Bernays trata de ensalzar. Incluye una definición sacada del diccionario de Funk y Wagnalls: “una congregación de cardenales que supervisa las misiones en el extranjero. También el Colegio para la Propaganda con sede en Roma fundado por el papa Urbano VIII en 1627 para la formación de los sacerdotes misioneros, Sagrado Colegio de Popaganda Fide.”
Según Bernays “La minoría ha descubierto que influir en las mayorías puede serle de gran ayuda. Se ha visto que es posible moldear la mente de las masas de tal suerte que éstas dirijan su poder recién conquistado en la dirección deseada. Esta práctica resulta inevitable en la estructura actual de la sociedad… la propaganda es el brazo ejecutor del gobierno invisible….en lugar de un mente la alfabetización universal ha brindado al hombre sellos de goma, tintados con eslóganes publicitarios, con artículos de opinión, con publicaciones científicas, con las banalidades de las gacetillas y los tópicos de la historia pero sin el menor rastro de pensamiento original. Los sellos de goma de un hombre cualquiera son duplicados idénticos a los que tienen otros millones de hombres, de modo que cuando se expone a esos millones de personas a los mismos estímulos, todos reciben las mismas improntas. Puede parecer exagerado afirmar que la mayor parte del público estadounidense se hace con sus ideas en este mercadeo al por mayor. La propaganda es el mecanismo por el que se diseminan las ideas a gran escala, en el sentido amplio de un proyecto organizado para extender una creencia o una doctrina en particular.” Así por ejemplo ahora la agenda 2030 o el NOM.
Como sigue diciendo el autor: “La nueva propaganda sirve para focalizar y satisfacer los deseos de las masas…. La minorías inteligentes son las que se sirven de la propaganda continúa y sistemáticamente…El especialista en propaganda ha terminado conociéndose como asesor en relaciones públicas. .. el agente trae una idea a la conciencia del público sirviéndose de los medios de comunicación modernos y de los grupos que conforman la sociedad. Pero es mucho más que eso. Sabe de la importancia de del curso de los acontecimientos, las doctrinas, los sistemas y las opiniones, y trata de conseguir el apoyo del público para determinadas ideas.”
No siempre la cosa debe conocerse por parte del público, al revés hay muchas cosas de suyo inconfesables. Si es verdad lo que nos cuentan, el falsario dispone de miles de asesores a costa del erario para cubrir todo lo que pueda imaginarse a beneficio personal o de su banda.
En palabras de Bernays, “el asesor debe hallarse en condiciones de enfrentar efectivamente los rumores y las sospechas y tratando de atajarlos en sus mismas fuentes…el estudio sistemático de la psicología de masas reveló a sus estudiosos las posibilidades de un gobierno invisible de la sociedad mediante la manipulación de los motivos que impulsan las acciones del hombre en el seno del grupo… el grupo posee características diferentes de las del individuo, y se ve motivado por impulsos y emociones ajenos a la psicología individual. De ahí que la pregunta sea: si conocemos el mecanismo y los motivos que impulsan a la mente de grupo, ¿no sería posible controlar y sojuzgar a las masas con arreglo a nuestra voluntad sin que éstas se dieran cuenta?»
Como el lector podrá comprender cuando tal propaganda como en el caso del socialismo cae en el barbecho de gente obtusa, encanallada, vaga, envidiosa o resentida socialmente el resultado resulta desastroso. “Y es que ningún sociólogo que se precie puede pensar todavía que la voz del pueblo expresa ideas divinas o particularmente sabias y sublimes. La voz del pueblo da expresión a la mente del pueblo que a su vez está domeñada por los líderes de grupo en los que cree y por aquellas personas que saben manipular a la opinión pública se compone de prejuicios heredados y de símbolos, lugares comunes que los líderes de opinión suministran a la gente.”
La psicopatología de las masas está fundada en la psicología del individuo. Bernays dedica un capítulo de su obra a la aplicación de la propaganda en la política. En el fondo da la razón al Platón de La República. La democracia deviene la antesala de la demagogia y la tiranía. Una partitocracia que debe ser combatida con instrumentos psicológicos y mentales, no solo mediante la definición de una politeia o estructura de poder lo más perfecta posible.
Esté o no en combinación con la Casa real, el falsario con su populosa corte de asesores saca partido de aplicar la propaganda de modo despiadado al servicio de su megalomanía, codicia y ambición. Pero no se debe olvidar que ello es posible porque la constitución es muy defectuosa pero sobre todo porque este medio siglo de monarquía ha destrozado la conciencia nacional de los españoles.