Desde hace mucho tiempo estamos completamente desengañados con lo que que creíamos que era España. Confiábamos en la limpieza electoral y en un cierto funcionamiento institucional, hasta que llegó la farsemia.
Y con la farsemia abrimos los ojos a lo bestia. Como si nos hubieran pegado un enorme bofetón. Fue entonces cuando nos dimos cuenta de la realidad de este país. Fue entonces cuando nos cercioramos de que lo que creíamos que funcionaba, no funcionaba, y lo que creíamos que no funcionaba era aún peor de lo que pensábamos.
Pero en el asunto electoral ya teníamos dudas desde mucho tiempo antes de la farsemia. Vimos lo que investigaba Elecciones Transparentes. Hemos hablado con sus responsables y hemos conocido, de primera mano, la realidad de lo que sucedía en cada proceso electoral. Incluso fueron capaces, en su momento, de hacer un recuento electoral, que nada tenía que ver con el que se nos daba oficialmente.
Podemos decir, tras esas comprobaciones, que Sánchez no ha ganado nunca unas elecciones, ni siquiera con una mayoría simple.
Pero ahora se nos presenta una nueva cita electoral, ¿y qué es con lo que nos encontramos? Con que la cosa, según las encuestas, estaría entre PP y PSOE. Que un partido como Vox podría convertirse en tercera o cuarta fuerza política. A pesar de lo que vemos a nuestro alrededor, que demuestra que esto no es así, eso es lo que se nos dice oficialmente.
El vídeo que pueden ver a continuación está grabado en Gijón. Interviene Santiago Abascal. ¿Creen ustedes que una tercera o cuarta fuerza política puede convocar a tanta gente? No, ¿verdad? Pues los primeros que deberían despertar y exigir limpieza electoral serían los votantes, simpatizantes y afiliados de Vox.