Entre los convocantes de la manifestación que se celebró en el día de ayer en la Plaza de Colón, en Madrid, ha habido alguno que nos ha llamado poderosamente la atención. Sobre la manifestación, simplemente decir que fue masiva y ya hay la habitual contrainformación, de los medios pro-Sánchez, diciendo que la cosa ha sido un rotundo fracaso, señal inequívoca de que no ha sido así.
Pero volviendo a aquello de los personajes que nos han llamado la atención, no hemos podido evitar sorprendernos con la asistencia y las palabras de, por ejemplo, Luis del Pino. Nos resulta tremendamente curioso el hecho de que, mientras hace unos días se convertía en el mejor vendedor de brebajes, auspiciados por ese mismo contra el que protestaba ayer.
La persecución, los insultos, los bloqueos y las palabras gruesas utilizadas por del Pino con ese asunto, llamaron la atención de todo el mundo. Pero lo que más ha llamado la atención ahora, es su intervención reclamando libertad, mientras hace bien poco sus ataques contra el que ejercía esa misma libertad para no inocularse eran casi continuos. Y además, siguiendo a rajatabla el dictado del propio gobierno.
Este tipo de circunstancias, qué quieren que les digamos, chirría bastante y nos hacen recordar aquello de «disidencia controlada».
Esto está lleno de putones de Babilonia-disidentes controlados