17 de agosto de 2023: El Borbón ha de mover ficha

Según el calendario electoral, hoy, 17 de agosto, es la fecha en la cual se reúnen las Cortes Españolas y los diputados y senadores tomarán posesión de sus escaños en sesiones plenarias con las que se abrirá la decimoquinta legislatura del Régimen del 78.

Se llevará a cabo la elección de las Mesas del Congreso y el Senado, mediante una votación secreta, y los presidentes de ambas cámaras serán elegidos por mayoría absoluta. Si no existiera persona alguna que lograra esta mayoría, se proclamarán presidentes a los que obtengan en una segunda votación, mayoría simple. A continuación se designarán a cuatro vicepresidentes y a cuatro secretarios, saliendo elegidas las personas que sumen mayor número de votos. Los elegidos ocuparán sus puestos en la Mesa Presidencial y quien haya logrado la Presidencia, solicitará de los demás diputados el juramento o promesa de acatar la Constitución.

Aquí comenzará el “show” de las idioteces inventadas por los bilduetarras y tontoseparatistas para no acatar formalmente la Constitución. Este pornográfico espectáculo, será la antesala de los pactos llevados a cabo por el Felón y sus mapaches para lo que dure la legislatura.

Mientras el inconsciente pueblo español está de vacaciones, desde el palacio real de la Mareta se está fraguando la destrucción de España. La actividad televisada y radiada de Sánchez y sus socios Frankestein, está siendo frenética. Por el contrario, el Partido Popular sigue festejando, en este verano azul, su inútil victoria electoral. Creo que en un esfuerzo vacacional de los jerarcas peperos, se han reunido ayer en su sede de Génova nº 13. También será esta una reunión “ponsnografica”. Entre Samper, González Pons  y Casero, no hacemos uno. 

Vox se ha quitado de la ecuación apoyando a Núñez Feijoo.

La ambición por tomar de nuevo el poder por parte del Frente Popular, se huele desde el 23 J. La desidia de saberse perdedor y bailarín, se ha vislumbrado desde esa fecha en los militantes del Partido Popular, los cuales siguen de veraneo preguntándose qué pasó.

Sólo Sánchez desea afanosamente el poder. Feijoo espera que la jefatura del gobierno le caiga de un guindo, por defecto.

España no tiene solución y el pueblo español es culpable de todo lo que suceda. Alguien tiene que decir a esta masa cobarde de solemnidad, que la desaparición de España conlleva la supresión de los sueldos de los funcionarios y de las pensiones. ¿Alguno de los múltiples insensatos votantes del Felón se lo ha planteado? ¿Acaso se creen que destruir España les va a salir gratis?

Mientras, la Casa Real está muy atareada con sus vacaciones de verano y con el asunto de que la “niña” se va a la “mili”. 

Esperemos que al monarca no se le olvide que tiene la potestad, a tenor del art. 99 de la Constitución, de  proponer a un candidato a la Presidencia del Gobierno, previa consulta con los representantes designados por los grupos políticos con representación parlamentaria, y a través del Presidente del Congreso. 

De momento, Sánchez ya le ha metido presión al monarca haciéndole saber que no puede proponer como candidato a Núñez Feijoo, por carecer de apoyos, sin mostrar los suyos.

En ningún precepto de la Constitución, o en  ley alguna, figura que el Rey ha de proponer como candidato a presidente del gobierno, al dirigente del partido que haya ganado las elecciones. Tampoco figura en artículo alguno, ni mucho menos, que Felipe VI deba de proponer a otro candidato que diga reunir en una mayoría, sin pruebas documentales, las voluntades de partidillos y de criminales para ser propuesto como candidato.

El Rey puede proponer como candidato a presidente del gobierno a cualquier español. La Ley no le obliga a proponer a quién le indiquen los partidos. Además, si el Rey propone a un candidato a presidente de gobierno, y este expone ante el Congreso de los Diputados un programa político del Gobierno que pretenda formar, contrario a la Unidad de la Patria y de la Monarquía, el Rey tiene la potestad de no nombrarle presidente del gobierno. Abundando en lo expuesto en el art. 92 de la Constitución, si transcurrido el plazo de dos meses, a partir de la primera votación de investidura, ningún candidato propuesto por el monarca, hubiere obtenido la confianza del Congreso, el Rey disolverá ambas Cámaras y convocará nuevas elecciones con el refrendo del Presidente del Congreso.

Esta facultad constitucional que se le otorga al Rey, queda ratificada en el art. 62 de la C.E. cuando taxativamente describe el precepto, que entre la funciones del Rey, le corresponden las de proponer el candidato a Presidente del Gobierno y, en su caso, nombrarlo, así como poner fin a sus funciones en los términos previstos en la Constitución.

Dicen que Felipe VI paró, con una intervención televisiva, un golpe de Estado dado por Puigdemont  en el otoño de 2017, contra la unidad de España y la Constitución. En agosto de 2023, el mismo delincuente prófugo, pretende dar otro golpe de estado, destruir España y abolir la Monarquía, pactando con el Felón.

¿Parará Felipe VI este golpe de estado que se está dando desde las más altas instituciones de la nación, con la complicidad de un prófugo, de unos delincuentes indultados y de unos filoterroristas?

¿Está trabajando el Rey y diseñando desde la Casa Real, una estrategia que ha de llevarle a evitar que el perdedor de las elecciones pueda ser presentado a las Cortes Generales para ser votado como candidato a Presidente del Gobierno?

¿Sabe Felipe VI que es él, como Rey, el único obstáculo para evitar la destrucción de nuestra nación y que el Felón vuelva a ser Presidente del Gobierno con la ayuda de delincuentes, filoetarras, separatistas y prófugos de la Justicia?

 ¿Cometerá Felipe VI el acto repugnante de proponer como candidato a Presidente del Gobierno a alguien que de antemano ha pactado con otros traidores, dar un golpe de estado para destruir España y abolir la Monarquía?

¿El Rey de España ejercerá su poder Constitucional de presentar a Feijoo como candidato a presidente de Gobierno, y si este no es votado en las dos votaciones reglamentarias, será capaz de convocar elecciones generales para diciembre de 2023?

¿Presentará el Rey  a un candidato independiente para que le voten la Cortes, en caso de no llegar a ser elegido Feijoo en las dos primeras votaciones?

Estas preguntas van a ser respondidas en un breve espacio de tiempo. 

En la esquizofrenia de los tiempos que vivimos, podremos llegar a ver  como el Rey tira a la basura su corona presentando a Sánchez como candidato, a pesar de conocer que el Felón previamente ha pactado, con el prófugo de Waterloo, un referéndum de independencia de Cataluña. Este acto ilegal contrario al artículo 2 de la Constitución,  conllevará la destrucción del Reino de España y la celebración de un inmediato y posterior referéndum sobre Monarquía o República. 

El Régimen del 78 habrá muerto a causa de un Golpe de Estado previsto en los puntos programáticos del Foro de Sao Paulo (Ideado por Fidel Castro y Lula da Silva), el cual, desde el 4 de julio de 1990, tiene un programa de asalto político a las naciones de Hispanoamérica, exactamente igual que el aplicado por Pedro Sánchez para dinamitar el Reino de España. Su objetivo principal es destruir las constituciones de la naciones democráticas desde el poder.

Estos dos comunistas, reinventaron el socialismo en ese contubernio, ideado tras la caída del Muro de Berlín. El posterior y heredero Grupo de Puebla, siguiendo con su misma estrategia mundialista, conseguirá, con la destrucción de nuestra patria y de su monarquía, su mayor objetivo geopolítico: Llevar el comunismo bananero a Europa de la mano de la nación más antigua de Occidente. Que tiemble la UE. La siguiente será Francia, y el resto caerán como fichas de dominó.

De nuevo la suerte de Europa se juega en España un 17 de agosto de 2023. El pueblo español y los votantes de la derecha del verano azul, siguen de vacaciones.