lunes, noviembre 24, 2025
InicioCienciaLas balizas V16 y sus efectos en las personas electro-hiper-sensibles (INCLUYE MODELO...

Las balizas V16 y sus efectos en las personas electro-hiper-sensibles (INCLUYE MODELO DE RECURSO ANTE LA DGT)

La electrohipersensibilidad, también conocida como hipersensibilidad electromagnética, es una condición en la que las personas experimentan síntomas adversos al exponerse a campos electromagnéticos (CEM) generados por dispositivos como teléfonos móviles, Wi-Fi, antenas o aparatos electrónicos.

Los síntomas comunes incluyen cefaleas, fatiga crónica, insomnio, irritabilidad, sensaciones de ardor o hormigueo en la piel, mareos, náuseas, palpitaciones y dolores musculares. Estos pueden variar en intensidad y suelen atribuirse a exposiciones a radiofrecuencias (RF), como las emitidas por redes celulares o GPS. En casos graves, las personas electrohipersensibles evitan áreas urbanas con alta densidad de señales electromagnéticas, optando por entornos rurales o «zonas blancas» libres de radiación.

Aunque las balizas V16 no están diseñadas para un uso continuo, su funcionamiento implica emisiones de campos electromagnéticos. Al activarse, utilizan radiofrecuencias para la comunicación IoT y GPS, emitiendo señales similares a las de un teléfono móvil en modo de datos. Estas emisiones ocurren cada 100 segundos durante el tiempo que permanezca encendida (al menos 30 minutos de autonomía continua), lo que podría exponer al usuario y a personas cercanas a niveles de RF, aunque algo más bajos en comparación con otros dispositivos cotidianos.

Para las personas electrohipersensibles, esto representa varios problemas potenciales:

  • Exposición Durante Emergencias: En un accidente o avería, activar la baliza implica una exposición directa a CEM en un momento de estrés. Quienes padecen EHS podrían experimentar un agravamiento inmediato de síntomas como cefaleas o náuseas, complicando la situación de emergencia. Aunque la baliza se coloca fuera del vehículo, las señales RF pueden penetrar el habitáculo, especialmente si el usuario permanece cerca.
  • Portabilidad y Almacenamiento en el Vehículo: Las normativas exigen llevar la baliza en el coche en todo momento, típicamente en la guantera. Aunque no emite señales en standby (con una autonomía de al menos 18 meses en reposo), algunos modelos podrían tener componentes electrónicos pasivos que generan campos magnéticos mínimos, o requerir conexiones Bluetooth para configuración inicial via app. Para EHS severos, incluso esta proximidad constante podría desencadenar síntomas crónicos como fatiga o irritabilidad, obligándolos a buscar alternativas o modificaciones no homologadas.
  • Interferencia en Entornos Sensibles: En áreas con múltiples vehículos (como atascos o parkings), una baliza activada podría afectar a EHS en vehículos cercanos. Las radiofrecuencias viajan distancias cortas, pero en concentraciones altas, podrían sumar a otras fuentes de CEM, exacerbando condiciones como trastornos del sueño o estrés.
  • Falta de Estudios Específicos: No hay investigaciones directas sobre el impacto de las balizas V16 en personas electrohipersensibles, ya que las búsquedas en fuentes confiables no revelan casos documentados. Sin embargo, dada la similitud con otros dispositivos RF, es razonable inferir riesgos basados en reportes generales de EHS. La DGT y fabricantes enfatizan la seguridad, pero no abordan explícitamente preocupaciones de salud relacionadas con CEM.

FORMULARIO RECLAMACIÓN BALIZAS

EsDiestro
Es Diestro. Opinión en Libertad
Artículo relacionados

Entradas recientes