Una de las guerras guerras están planteando los agendistas, en estos momentos, es la de la farsemia climática. Al igual que con la sanitaria, tienen una obsesión enfermiza por encerrarnos para someternos y, con ese objetivo, está claro que son capaces de hacernos lo que haga falta, tal y como han hecho con el virus inexistente.
Nos hablan de un problema climático falso, del que nos culpan, mientras ellos viajan tranquilamente en sus yates y jets privados, contándonos, por otro lado, que el gran problema son nuestros coches de más de 20 años. Pero eso no es lo peor, lo peor es que para hacernos creer todo eso se pasan el día fumigando el cielo provocando alteraciones en las lluvias, generando un calor artificial y, muy probablemente, provocando problemas de salud a mucha gente, con lo que tienen justificadas todas las farsemias.
Pero a pesar de lo evidente que es lo que hacen en el cielo, todavía hay mucha gente que no lo quiere ver, que, simplemente, no mira al cielo, o que si lo hace, se basa en lo que les cuenten los farsantes expertos del clima, como el impresentable Mario Picazo, que nos cuenta aquello de estelas de condensación de vapor de agua. Solo habría que preguntarle al tipo: «y cuando no fumigan, ¿qué pasa, que no ese día no hay tráfico aéreo?
Por eso, porque todavía hay mucho atontado que no quiere ver la realidad, cada día son más descarados, cada día disimulan menos. Hoy hemos visto este vídeo en Twitter. En él se puede ver la tremenda fumigación que están sufriendo hoy en Barcelona. ¿Es esto normal?