jueves, mayo 8, 2025
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Cuando la tiranía se derrumba

«Cuando la tiranía se derrumba procuremos no darle tiempo para que se levante». Esta frase la pronunció Robespierre en 1793, el primer genocida de la Historia Moderna, asesino de los habitantes de la región de la Vendeé, presidente de la Convención Nacional Francesa durante la época del Terror y miembros de la facción de los jacobinos, durante la maldita Revolución Francesa.

En el día de ayer, el tirano que gobierna en España dio claras señales de estar derrumbándose y encontrase solo  en el circo del Congreso de los Diputados. Fue imposible que articulara una frase que no fuera sacada de un bote de conservas y careció de argumentos para explicar la causa, de modo medianamente convincente, de los desastres que cada semana sufre España desde que se encaramó al poder. Este sátrapa que perdió las últimas elecciones, no asumió responsabilidad alguna  del «apagón» que dejó a España sin electricidad,  por primera vez en su Historia. Culpó a todo tipo de entes etéreos, de los siniestros que el mismo provoca con su fanatismo ideológico basado en el Mundialismo, en la Agenda 2030 y en su narcisismo.

La destrucción del Estado, en manos de este individuo,  esta asegurada. No dejará el poder hasta que no sea apeado del estrado al que le han alzado sus socios terroristas, delincuentes, traidores y separatistas. El dictador Sánchez, para poder mantenerse en el poder,  se rodea de zafios malvados sin escrúpulos, porque le gusta ser adulado y ningún hombre de espíritu elevado le adularía, tal y como aseveró Aristóteles.

Sánchez es cobarde, le vimos correr, con mucho miedo, cuando vio al pueblo alzarse contra él en Paiporta. Como cualquier manso, es capaz hasta de saltar la valla para evitar el capote y enfrentarse a la verdad.

Conocemos a Sánchez y sus debilidades. Tiene su talón de Aquiles sangrando:  

– Begoña y su Hermano procesado por diversos delitos; su segundo.

– Ábalos al borde del suplicatorio por su afición al dinero público, a las tusonas, barraganas y cantoneras;.

– Su Fiscal General acorralado por borrar correos para sortear la acción de la justicia,  

– Conde-Pumpido a punto de jubilarse, dejando huérfano el cargo de factótum constitucional de su delirio de permanencia eterna en el poder, 

– La degradación de las instituciones del Estado es imparable.  

– Ha sumido en el caos en la Nación, a causa de la falta de inversiones, ya que el dinero público se gasta en chiringuitos ideológicos y en comprar voluntades de futuros votantes de patera, no en infraestructuras.

– Es responsable de la muerte de decenas de miles de españoles, a causa de la pandemia, de las riadas y de los apagones.

– Tiene al pueblo español indefenso, sin unas Fuerzas Armadas operativas, sin seguridad dentro y fuera de las fronteras, con leyes que sueltan a violadores y pederastas, y con una inmigración ilegal asaltando nuestra patria, a la que el Felón pronto utilizará como futuros votantes para obtener los 500.000 votos que le faltan para agarrarse al poder.

– Ha destruido la economía y el tejido industrial, con leyes e impuestos insostenibles, destruyendo pequeñas empresas y autónomos, a los que quiere de subvencionados cautivos de las paguitas de supervivencia. 

– Nos ha dejado sin energía eléctrica fiable, sujetos a los vaivenes de su electricidad ideológica.

– La corrupción es su modo de vida, junto con la mentira,.

– Es esclavo de un móvil «Pegasus» y de un rey marroquí, a quién ha convertido en su amo.

– Ha llevado a España a la insignificancia internacional, aliándose con la basura del mundo y con las más abyectas dictaduras comunistas e islámicas.

Pero ante estos fantasmas que le persiguen, el tirano Sánchez tiene miedo. El «Manso de Paiporta» siente el miedo. El pionero de la Economía en el siglo XIX , Jean Baptiste Say, dijo que «como el miedo es el mayor suplicio de los tiranos, el crimen más irremisible a sus ojos, es hacerles sentir miedo». Hagamos sentir miedo a Sánchez para derrocarle.

El Psicópata no siente miedo ante una oposición, que como la del Partido Popular, cada vez que interviene en el Congreso de los Diputados, lo hace para describir, de un modo más o menos dramático o acertado, los actos de Sánchez. Fuera de esto, no causa miedo al Sátrapa de la Moncloa. La oposición se dedica a vegetar en las instituciones, mientras espera que el oponente caiga por su propio peso para sucederle. Mientras pacta con él cada vez que se tambalea (se excusan diciendo  que son un partido de Estado). Sánchez nunca caerá si no se le derriba y el Partido Popular no lo va a derribar, porque es su cómplice, y porqué su fin ideológico, es el mismo que el del propio Tirano. Algún día Feijóo nos explicará él porqué de no hacer desfilar a Begoña y a Pedro por una comisión de investigación del Senado, donde el PP tiene mayoría. 

Sánchez sabe que cuando salga de la Moncloa, le espera el banquillo de los acusados. Lo tiene muy claro, y el ejemplo de lo que va a acontecer, está en su propia familia.

Hay que salir a la calle, hay que contradecir los mandatos tiránicos del Dictador con normas contrarias emanadas de instituciones que el sátrapa no haya colonizado. No hay que pactar con él para nada. Así sentirá el miedo que necesita el tirano para temblar.

No queda otra. Espero al Pueblo Español en la Plaza de Colón el próximo sábado a las 12 horas. Nuestra patria ha de ser la casa de los hombres libres, no una jaula de esclavos. 

Para terminar, hagamos nuestro lo que dijo Mahatma Gandi: «Recordar que a lo largo de la historia, siempre ha habido tiranos y asesinos, y por un tiempo parecían invencibles. Pero siempre han acabado cayendo. Siempre».

 

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3 COMENTARIOS

  1. Les PIDO POR FAVOR que HOY a las 22:00 ACUDAN a ESTA CITA porque VAMOS a DAR UNA INFORMACIÓN CLAVE sobre POR QUÉ NO SE VA A TOCAR NI A MAZÓN NI al GOBIERNO de SANCHEZ por su inacción e incompetencia en la DANA:

    https://www.youtube.com/watch?v=Zuf6kPOyNfQ&ab_channel=Rub%C3%A9nGisbert

    La INSTRUCCIÓN MEDIÁTICA de la DANA que se está empleando para POLARIZAR con la tragedia y DISTRAER de lo FUNDAMENTAL QUE NO SE ESTÁ INVESTIGANDO:
    https://www.youtube.com/watch?v=GqfXEAp4Htg&ab_channel=Rub%C3%A9nGisbert

  2. Con permiso de:
    Juan Manuel de Prada

    Una conducta culposa o imprudente es aquella que se ejecuta sin el exigible deber de cuidado, con desidia o negligencia pero sin intencionalidad. Una conducta dolosa, por el contrario, está inspirada por la mala fe o la alevosía. En la hecatombe valenciana parece evidente que diversos miembros del Gobierno autonómico, con Mazón a la cabeza, actuaron con desidia o negligencia, demostrando una incompetencia supina. Mazón, al parecer inconsciente de la gravedad de la situación, se quedó pelando la pava y se ausentó durante horas de su puesto, al que luego volvió con ansias de compensar su ausencia del primer momento; tantas ansias, y tan obcecadas, que cayó como un pipiolo en la trampa que le tendieron quienes desde Madrid no actuaban con culpa, sino con un calculadísimo dolo.

    Porque el Gobierno encabezado por el doctor Sánchez, a pesar de conocer la magnitud de las inundaciones, e incluso después de producirse la terrible hecatombe, permaneció impasible por un perverso cálculo político. En Moncloa advirtieron que la incompetencia de Mazón podía debilitar extraordinariamente al adversario político, o incluso arrojarlo a un arrabal de descrédito y repulsa ciudadana, como ocurrió tras la escabechina del 11-M; y resolvieron abstenerse de intervenir, para que Mazón se cociese en la salsa cada vez más espesa de su ineptitud. Renunciaron miserablemente a asumir sus competencias, a sabiendas de que el obcecado Mazón carecía de medios para atender las necesidades de los damnificados y hasta para rescatar los cadáveres. Así, absteniéndose de intervenir, pensaron que sus adversarios políticos se tragarían el marrón; y que luego las masas cretinizadas les exigirían sólo a ellos responsabilidades (como, en efecto, ya está ocurriendo entre las adscritas al negociado de izquierdas, desembarazadas de la nefasta manía de pensar). La maquinación prueba una falta de escrúpulos en verdad abominable. En los últimos días, las intoxicaciones gubernativas han reconocido inconscientemente está actuación dolosa, propagando la especie de que «todos los expertos consultados desaconsejaron al Gobierno apartar las autoridades valencianas de la gestión de la crisis». ¡Naturalmente! Sin duda eran ‘expertos’ en marrullerías electoreras que aconsejaron dejar la gestión de la catástrofe en manos ineptas, para sacar tajada política.

    Desde luego deben pedirse responsabilidades a quienes mostraron una conducta culposa en su gestión; pero esa gestión fue desastrosa por la dolosa inacción del Gobierno, que antepuso malignamente el rédito político a las tribulaciones de sus compatriotas. Además, queda demostrado que el régimen autonómico instaurado por el Régimen del 78 es un completo fiasco que facilita intereses sectarios y perjudica el bien común, generando enfrentamientos entre españoles de distintas regiones y atribuyendo a gobiernos autonómicos competencias desmesuradas para las que carecen de medios y preparación idóneos.

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