En unos tiempos de absoluta locura distópica, tanto en España como en el resto del mundo, nos encontramos con medidas tan ilógicas como las de demoler centrales térmicas o de carbón, cuando hay problemas de suministros de energía, o la de demoler presas y pantanos, cuando nos cuentan que hay problemas de sequía.
En todas estas locuras participan organismos subvencionados y dependientes de oscuras élites, como las organizaciones de ecolojetas. Estos, los ecolojetas, se han convertido, desde el primer día, en el auténtico brazo armado de esas élites y de los criminales agendistas, con propuestas tan asquerosas como las que estamos sufriendo en España en los últimos tiempos: el derribo de presas y pantanos.
Pero lo peor de este asunto es que ellos nos lo venden como que están «liberando ríos», tal y como nos cuenta WWF en este vomitivo PDF de abril de 2018.
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En el documento en cuestión podrán ver los derribos de presas, pantanos y azudes en España, de los que tan orgullosos se sienten, perpetrados entre los años 2012 y 2013. Y los tipejos, en una apartado de conclusiones, se alegran de que se hayan aumentado los proyectos de demolición en un país en el que, por otro lado, los mismos que ordenan demoler te cuentan que hay problemas con el agua.
Es terrible tener que luchar contra los que financian a estos descerebrados, contra los propios descerebrados y contra los miserables políticos que sirven exclusivamente a sus intereses. Chalados sin fronteras.
La biodiversidad y la biomasa han sido desterradas del mapa ambiental, desplazadas por el irreal y acientífico dogma del CO2. Ecologistas en Acción son Antiecologistas en Acción, viles bienpagás de los dueños de los fondos buitre y el FMI
Para estos suplantadores de las ONGs ecologistas no existen los aviones militares geoingenieriles que ni aparecen en el flightradar ni producen estelas tóxicas provocadoras de calores y sequías cuyo contenido tampoco se publica por ser secreto militar