El Libro de los Jubileos, un texto antiguo que fue deliberadamente excluido de la Biblia convencional, ha sido objeto de controversia y misterio durante siglos. Según una publicación reciente en X por el usuario @Mente_Sabiaa, este libro, también conocido como «Pequeño Génesis», pretende ser una revelación divina entregada directamente a Moisés en el Monte Sinaí, pero no escrita por él, sino dictada por ángeles. Este detalle, junto con otros aspectos de su contenido, lo convirtió en una amenaza para las autoridades religiosas de la época, quienes, según el hilo de X, lo mantuvieron oculto a los creyentes.
Este texto sagrado fue ELIMINADO deliberadamente de la Biblia…
El Libro de los Jubileos.
Durante generaciones, las autoridades de la Iglesia lo mantuvieron OCULTO a los creyentes…
¿Por qué?
Aquí está la verdad OCULTA sobre el Libro de los Jubileos que NO quieren que… pic.twitter.com/Lhn0dgZSh4
— Mente Sabia (@Mente_Sabiaa) March 27, 2025
El Libro de los Jubileos fue escrito entre 170 y 150 a.C., probablemente por un judío palestino con formación sacerdotal y afinidad con los esenios, una secta judía conocida por su rigor y sus textos apocalípticos, como los encontrados en los Rollos del Mar Muerto. Este texto, que expande las narraciones del Génesis y el Éxodo, se presenta como una «historia de la división de los días de la ley y del testimonio», según lo que Dios habría revelado a Moisés a través de ángeles durante los cuarenta días que pasó en el Monte Sinaí.
A diferencia del Pentateuco, que se atribuye directamente a Moisés, Jubileos afirma que los ángeles fueron los encargados de transcribir estas palabras, lo que otorgaba al texto una autoridad celestial directa. Este aspecto, según el hilo de X, desafiaba la autoridad de los líderes religiosos de la época, quienes veían en esta narrativa una amenaza a su control sobre las interpretaciones bíblicas.
Uno de los elementos más distintivos del Libro de los Jubileos es su sistema cronológico. El texto divide la historia en ciclos de 49 años, conocidos como «jubileos», ofreciendo una estructura precisa del tiempo desde la creación hasta la época de Moisés. Este sistema, según el hilo de X, contradecía los calendarios religiosos tradicionales y las interpretaciones aceptadas de la cronología bíblica, lo que lo hizo peligroso para las autoridades.
Además, Jubileos propone un calendario solar de 364 días al año, al que se refiere como un «año completo». Este calendario, dividido en cuatro cuartos de 91 días cada uno (13 semanas de 7 días), aseguraba que las fechas religiosas, como los días santos, permanecieran fijas en el mismo día de la semana cada año, ya que 364 es divisible por 7.
Sin embargo, este calendario solar entraba en conflicto directo con el calendario lunisolar de la tradición judía, que tiene 354 días y requiere ajustes periódicos.
Según el hilo de X, esta discrepancia significaba que los días santos se celebrarían en fechas completamente diferentes, lo que llevó a acusaciones de que los líderes religiosos estaban celebrando sus cultos en días equivocados. El texto incluso polemiza contra los grupos judíos que usaban el calendario lunar, advirtiendo que su sistema causaba un desfase de 10 días al año. Esta disputa no fue menor: el calendario dictaba el ritmo de la vida religiosa, y Jubileos desafiaba directamente las prácticas establecidas, lo que generó intensos debates entre las comunidades judías de la antigüedad.
El Libro de los Jubileos no solo ofrece una cronología alternativa, sino que también llena vacíos en las narraciones bíblicas con detalles extraordinarios. Según el hilo de X, el texto revela eventos previos al Jardín del Edén, la historia completa de los primeros años de vida de Abraham y las interacciones de Noé con los ángeles. Por ejemplo, se dice que los ángeles llevaron físicamente a Adán al Edén, le enseñaron a los humanos el lenguaje, la escritura, la medicina y la agricultura, y mantuvieron una conexión íntima con la humanidad. Estas afirmaciones contradecían la doctrina tradicional que enfatizaba una separación estricta entre el cielo y la tierra, lo que hizo que el texto fuera visto como herético por algunos.
Además, Jubileos eleva a Enoc, una figura secundaria en el Génesis, a un estatus extraordinario. Según el texto, Enoc fue el primer humano en aprender a escribir, un maestro astrónomo que creó el calendario y un colaborador directo de seres divinos. Esta representación, como señala el hilo de X, le otorgaba a Enoc una autoridad espiritual que rivalizaba con la de Moisés, algo que las jerarquías religiosas no podían tolerar. De manera similar, el libro afirma que muchas leyes bíblicas, como las reglas alimentarias kosher, la observancia del sábado y las fiestas judías, existían mucho antes de Moisés. Por ejemplo, Abraham, que vivió siglos antes, ya las seguía, lo que contradecía el cronograma tradicional del pacto divino.
El misterioso ‘Libro de Enoc’ (incluye un PDF con el libro completo)
El Libro de los Jubileos también contiene enseñanzas que resultaron demasiado extremas para las primeras comunidades cristianas. Según el hilo de X, el texto promueve una estricta separación racial, afirmando que la mezcla racial conlleva castigos divinos y prohibiendo el matrimonio con no israelitas. Incluso sostiene que esta separación fue ordenada antes de la creación, una idea que chocaba con los esfuerzos de las primeras comunidades cristianas por atraer conversos de diversas procedencias. Estas enseñanzas, junto con las afirmaciones sobre leyes preexistentes a Moisés, hacían del texto un desafío directo a las interpretaciones aceptadas de la época.
A pesar de su exclusión de la mayoría de los cánones bíblicos, el Libro de los Jubileos encontró un hogar en la Iglesia Ortodoxa Etíope Tewahedo y entre los judíos etíopes (Beta Israel). Según el hilo de X, estas comunidades lo consideran un texto sagrado y lo han integrado en su canon bíblico, que consta de 81 libros, el más extenso y diverso entre las tradiciones cristianas. La Iglesia Ortodoxa Etíope también incluye otros textos únicos, como el Libro de Enoc y los tres libros de Meqabyan, que no tienen relación con los Macabeos griegos. Este canon más amplio refleja la rica tradición etíope, que ha preservado textos que otras iglesias rechazaron.
La conexión etíope con Jubilees también se refleja en su arte religioso. El arte cristiano etíope, conocido por su estilo distintivo, a menudo combina escenas religiosas con representaciones de figuras contemporáneas, como los patrones que encargaban las obras. Esta tradición, que se volvió más realista hacia el siglo XX, muestra la reverencia cultural por textos como Jubileos, que han sido parte integral de la identidad religiosa etíope.
Aunque fue oficialmente excluido del canon bíblico en la mayoría de las tradiciones, el impacto del Libro de los Jubileos es innegable. Según el hilo de X, fragmentos del texto fueron encontrados entre los Rollos del Mar Muerto, lo que indica su circulación entre las comunidades judías de la antigüedad. Además, influyó profundamente en el pensamiento judío y cristiano primitivo, y sus conceptos aparecen en numerosos escritos religiosos. Escritores cristianos antiguos como Epifanio y Justino Mártir citaron Jubilees, lo que demuestra que era altamente valorado en algunos círculos antes de su rechazo generalizado.
El texto también ofrece detalles únicos sobre eventos bíblicos. Por ejemplo, tras el Diluvio, describe cómo la tierra fue dividida entre los tres hijos de Noé y sus dieciséis nietos, y cómo el hebreo, olvidado tras la Torre de Babel, fue enseñado a Abraham por los ángeles. Además, Jubilees contiene alusiones al reino mesiánico y referencias tempranas a las leyes noájidas, que más tarde se desarrollarían en la tradición judía.
El hilo de X plantea una pregunta intrigante: ¿por qué un texto tan significativo fue suprimido? La respuesta parece estar en su contenido disruptivo. Desde su cronología y calendario alternativos hasta sus historias ampliadas y enseñanzas controvertidas, Jubileos desafiaba las narrativas y estructuras de poder establecidas. Su énfasis en la intervención angelical, la autoridad de figuras como Enoc y las leyes pre-mosaicas amenazaba la autoridad de los líderes religiosos, mientras que sus posturas sobre la separación racial dificultaban su aceptación en comunidades que buscaban expandirse.
Sin embargo, como señala el hilo de X, un texto tan poderoso no desaparece fácilmente. Sobrevive porque contiene verdades que resuenan, a pesar de los intentos de silenciarlas. Su preservación en Etiopía y su influencia en otros escritos religiosos demuestran que las ideas de Jubileos eran demasiado significativas para ser completamente erradicadas.
El Libro de los Jubileos es mucho más que un texto apócrifo: es una ventana a las creencias, debates y tensiones de las comunidades judías y cristianas antiguas. Su exclusión de la Biblia no disminuyó su impacto; al contrario, su supervivencia en tradiciones como la etíope y su presencia en los Rollos del Mar Muerto muestran su relevancia duradera. Como destaca el hilo de @Mente_Sabiaa, este texto nos invita a reflexionar sobre las verdades ocultas que las autoridades religiosas de antaño no querían que descubriéramos, y nos recuerda que la historia de la fe es mucho más compleja de lo que los cánones oficiales nos han hecho creer.