En una conferencia de prensa celebrada recientemente en la Casa Blanca, Tulsi Gabbard, actual Directora de Inteligencia Nacional, ha hecho unas impactantes declaraciones que han provocado un torbellino de reacciones. Tulsi Gabbard ha afirmado que «el ex presidente de Estados Unidos, Barack Obama, intentó derrocar al gobierno de EEUU en 2016 como parte de una conspiración traicionera». Según sus palabras, «este intento fue exitoso en 2020 con el objetivo de encubrir las acciones previas», y ahora, asegura, «la verdad ha sido descubierta».
La acusación de Gabbard se enmarca dentro de un contexto de tensiones políticas y fuertes sospechas de conspiración que han persistido desde las elecciones presidenciales de 2016 y 2020. Gabbard, conocida anteriormente por su carrera como congresista demócrata y su posterior transición a la independencia política, ha desempeñado un papel crucial en estas acusaciones. Su posición actual como Directora de Inteligencia Nacional le otorga mucha importancia al contenido de sus palabras, lo que ha intensificado el interés en los estadounidenses y las reacciones a sus comentarios.
Pero, previamente a estas declaraciones, la directora de inteligencia nacional aseguró en una reunión en la Casa Blanca que habían localizado documentos en bolsas relacionados con corrupción en las elecciones de 2020: «Estamos encontrando documentos literalmente escondidos en la parte trasera de cajas fuertes en oficinas aleatorias en estas bolsas y en otras áreas, lo que nuevamente habla de la intención de aquellos que están tratando de ocultar la verdad al pueblo estadounidense.» Ojala salga todo a la luz y se confirme lo que se lleva sospechando desde entonces.
Tulsi Gabbard, antes de asumir su cargo actual, tuvo una carrera notable en la política y el servicio militar. Nació el 12 de abril de 1981 y sirvió como congresista demócrata por el Estado de Hawai antes de convertirse en una figura independiente. Además de su carrera política, Gabbard ha sido teniente coronel en la Reserva del Ejército de Estados Unidos desde 2021, destacándose por su servicio en una unidad médica en Irak. Su nombramiento como Directora de Inteligencia Nacional en 2025 la ha posicionado como una de las figuras clave en la seguridad nacional del país.

La Inteligencia Nacional en Estados Unidos alude al conjunto de actividades y organizaciones que recopilan, analizan y diseminan información crítica para apoyar las políticas de seguridad nacional y los intereses extranjeros del país. La Directora de Inteligencia Nacional, como cabeza de la Comunidad de Inteligencia de Estados Unidos, tiene la responsabilidad de supervisar y coordinar estas actividades a través de diversas agencias gubernamentales. Este rol es crucial para garantizar que la información de inteligencia sea precisa, oportuna y esté alineada con los objetivos nacionales.