El arresto de Vissarion, el autoproclamado Cristo de Siberia. El 22 de septiembre de 2020, las autoridades rusas detuvieron en una remota zona de Siberia a Sergei Torop, conocido entre sus seguidores como Vissarion, líder de una conocida secta religiosa.
Líder de una secta de retrasados en Rusia que se quedaba con la pasta es arrestado. Otra historia surrealista que os traemos del confín de Europa y Asia. Un auténtico objeto que gustaba de imitar a Jesús de Nazaret y que entre otras cosas les decía a sus adeptos que no se gastaron el dinero en alcohol porque era mejor dárselo a él. Un pedazo de jeta que podría ser perfectamente político en cualquier sitio y especialmente en España, tierra de borrachos y retrasados por excelencia. La verdad es que Abascal o Zapatero tienen mucho que aprender, aunque también está claro que la gente que sigue a estos tipos o que los ha seguido en algún momento reciente no necesitan que su amado líder disimule gran cosa
Vissarion, quien fundó la Iglesia del Último Testamento en 1991, fue arrestado junto a otros dos dirigentes del grupo, Vadim Redkin y Vladimir Vedernikov. Según informó una portavoz del Comité de Investigaciones de Rusia —organismo comparable al FBI estadounidense—, los tres están acusados de extorsionar económicamente a sus fieles y de infligirles daños físicos y psicológicos.
Torop, de 59 años y ex agente de tráfico, aseguraba ser la reencarnación de Jesucristo. Desde la caída de la Unión Soviética, consiguió reunir a miles de adeptos. En una entrevista concedida a la agencia AFP en 2009, explicó que había sentido dentro de sí una fuerza que llevaba mucho tiempo contenida y que finalmente emergió, llevándolo a proclamarse hijo de Dios. Su “despertar espiritual” habría ocurrido en 1989, tras perder su empleo.
Sus discípulos, organizados en comunidades aisladas en la región de Krasnoyarsk, viven bajo estrictas reglas: tienen prohibido fumar, beber alcohol, usar dinero, comer carne, pan, productos de trigo, café, té, azúcar y deben llevar una vida austera. Uno de los asentamientos más conocidos es la llamada Ciudad del Sol, fundada en 1995 en la región de Kuraga. Se estima que en el año 2000 la secta contaba con unos 10.000 seguidores repartidos por distintos países.
El operativo de captura fue amplio: medios locales reportaron la llegada de varios helicópteros y decenas de agentes enmascarados que registraron viviendas y edificios cercanos. Imágenes difundidas por la televisión rusa mostraron a Torop y uno de sus colaboradores escoltados por militares hasta un helicóptero.
La Iglesia del Último Testamento combina rituales de la tradición ortodoxa rusa con ideas de reencarnación y visiones apocalípticas, según detalló The New Yorker en un artículo de 2013. De acuerdo con la BBC, los líderes empleaban tácticas de control psicológico y manejaban los recursos económicos de los miembros para mantener la estructura del grupo. “Utilizaron el dinero de sus seguidores y ejercieron violencia mental sobre ellos”, declaró un portavoz a los medios estatales.
