El mundo de la música está de luto tras la confirmación del fallecimiento de Brian Wilson, cofundador, cantante, compositor y principal fuerza creativa de The Beach Boys, a los 82 años. La noticia fue anunciada por su familia el pasado miércoles 11 de junio a través de un emotivo comunicado publicado en su sitio web oficial y redes sociales: “Estamos desconsolados al anunciar que nuestro querido padre, Brian Wilson, ha fallecido pacíficamente. Era un verdadero genio musical, y aunque el mundo lo conocía como un Beach Boy, nosotros lo conocíamos y amábamos como esposo, padre y amigo”. No se ha especificado la causa exacta de su muerte, aunque Wilson había sufrido varios problemas de salud en los últimos años, incluida una batalla contra la demencia diagnosticada en 2024.
Brian Wilson, nacido en 1942 en Hawthorne, California, fue el arquitecto del icónico “sonido de California” que catapultó a The Beach Boys a la fama mundial en la década de 1960. Junto a sus hermanos Carl y Dennis, su primo Mike Love y su amigo Al Jardine, Wilson fundó la banda en 1961, transformando el género del pop con canciones que evocaban la juventud, el surf, los autos rápidos y el sol eterno de California. Éxitos como “Surfin’ U.S.A.”, “I Get Around”, “California Girls”, “Good Vibrations” y “God Only Knows” no solo dominaron las listas de éxitos, sino que redefinieron la música popular con sus armonías complejas, arreglos innovadores y letras cargadas de emoción.
Wilson fue el motor creativo detrás del álbum Pet Sounds (1966), considerado por muchos como uno de los mejores discos de la historia. Este trabajo, que incluía canciones como “Wouldn’t It Be Nice” y “God Only Knows”, marcó un punto de inflexión en la música pop, influenciando a artistas como The Beatles y generaciones posteriores de músicos, desde bandas indie como Yo La Tengo hasta artistas como Paul McCartney, quien describió a Wilson como “uno de los grandes genios americanos” al inducirlo al Songwriters Hall of Fame en 2000. Su ambición musical llevó a The Beach Boys a trascender el surf rock, explorando sonidos experimentales y líricas introspectivas que resonaron en todo el mundo.
A pesar de su brillantez, la vida de Wilson estuvo marcada por profundas luchas personales. Sufrió abuso psicológico por parte de su padre, Murry Wilson, quien también fue el primer mánager de la banda, y enfrentó problemas de salud mental y adicción a las drogas durante gran parte de su vida. En los años 60 y 70, Wilson se retiró periódicamente de la vida pública, afectado por el estrés de su papel como líder creativo y las presiones de la fama. Su relación con el controvertido psicólogo Eugene Landy, quien ejerció un control excesivo sobre su vida en las décadas de 1970 y 1980, añadió más dificultades, hasta que Landy perdió su licencia en 1989.
En 2024, Wilson fue puesto bajo una tutela judicial debido a un “trastorno neurocognitivo severo” (como demencia), tras la muerte de su esposa, Melinda Ledbetter, en enero de ese mismo año. Melinda, con quien se casó en 1995 y adoptó cinco hijos, fue descrita como su “salvadora” y un pilar fundamental en su vida. La tutela fue gestionada por su publicista Jean Sievers y su mánager LeeAnn Hard, asegurando su cuidado hasta el final de sus días.
La noticia de su muerte desató una oleada de tributos de figuras prominentes de la música y el entretenimiento. Su compañero de banda y primo, Mike Love, escribió: “Brian no solo fue el corazón de The Beach Boys, fue el alma de nuestro sonido. Sus dones musicales eran incomparables”. Al Jardine, otro miembro fundador, expresó: “Brian Wilson, mi amigo, mi compañero de equipo de fútbol, mi compañero de banda y mi hermano en espíritu, siempre me sentiré bendecido por haberte tenido en nuestras vidas tanto tiempo como lo hiciste”.
Artistas como Elton John, quien lo llamó “la mayor influencia en mi composición”, Bob Dylan, Keith Richards, Ronnie Wood, Nancy Sinatra y John Stamos, quien colaboró con la banda y apareció junto a ellos en Full House, también compartieron sentidos homenajes. Stamos escribió: “Las canciones de Brian no solo sonaban de fondo en nuestras vidas, moldearon quiénes éramos. Su música me hizo sentir cosas que no sabía cómo expresar”. Incluso Kate Hudson y Micky Dolenz de The Monkees se unieron a los tributos, destacando el impacto universal de Wilson.
Brian Wilson deja un legado imborrable en la música. Fue inducido al Salón de la Fama del Rock and Roll en 1988 junto a The Beach Boys y recibió un Kennedy Center Honor en 2007 por su contribución a la cultura estadounidense. Su vida fue retratada en el documental Brian Wilson: Long Promised Road (2021) y en la película biográfica Love & Mercy (2015), que exploraron tanto su genialidad como sus desafíos personales.
Wilson tiene siete hijos, entre otros Carnie y Wendy Wilson del grupo Wilson Phillips, quienes también expresaron su dolor. Carnie escribió en redes sociales: “Sé que está descansando en el cielo… o tal vez tocando el piano para la abuela Audree”. La familia pidió privacidad para procesar su duelo, consciente de que comparten su pérdida con el mundo.
Con su partida, Brian Wilson se reúne, como dijo Al Jardine, “con Carl y Dennis, cantando esas hermosas armonías otra vez”. Su música, que capturó la esencia de una era y tocó los corazones de millones, seguirá resonando para siempre, recordándonos que, como dijo Mike Love, Brian Wilson ahora es “atemporal”.