El exsecretario de Organización del PSOE, Santos Cerdán, se enfrenta a una grave crisis judicial tras su comparecencia este lunes ante el Tribunal Supremo, donde la Fiscalía Anticorrupción ha solicitado su ingreso en prisión provisional sin fianza por su presunta implicación en una trama de corrupción vinculada a adjudicaciones irregulares de obra pública. El fiscal jefe, Alejandro Luzón, considera a Cerdán el «jefe» de esta red delictiva, que también involucra al exministro de Transportes, José Luis Ábalos, y a su exasesor, Koldo García. A pesar de las acusaciones, Cerdán ha negado haber cobrado mordidas o participado en los amaños, cuestionando la validez de las pruebas en su contra.
Santos Cerdán ha comparecido este lunes ante el Tribunal Supremo como investigado por los delitos de organización criminal y cohecho, enfrentándose a una posible pena de hasta 11 años de prisión. Durante su declaración, Cerdán negó cualquier participación en el cobro de mordidas o en la manipulación de adjudicaciones, asegurando que no se reconoce en los audios grabados por Koldo García, los cuales son una pieza clave de la investigación. Según fuentes judiciales, Cerdán ha cuestionado la validez técnica de estas grabaciones y ha afirmado que su papel en el PSOE no incluía responsabilidades sobre los gastos o las adjudicaciones relacionadas con Ábalos.
Sin embargo, la Fiscalía Anticorrupción, liderada por Alejandro Luzón, ha solicitado prisión provisional sin fianza para Cerdán, argumentando que existe riesgo de fuga y de destrucción de pruebas. El fiscal sostiene que Cerdán desempeñó un «papel activo» en la gestión de los fondos obtenidos ilícitamente, situándolo como una figura central en la trama. La UCO destaca que Cerdán no solo habría gestionado pagos, sino que también tenía conocimiento previo de las licitaciones, a pesar de no formar parte del Ministerio de Transportes ni del Ejecutivo.