Han transcurrido casi seis años desde que la joven activista Greta Thunberg llamó la atención sobre una supuesta advertencia científica que afirmaba que el cambio climático podría llevar a la extinción de la humanidad si no se abandonaban los combustibles fósiles antes de 2023. Esta declaración se atribuyó a James Anderson, profesor de la Universidad de Harvard, quien también sugirió que el hielo flotante del Ártico desaparecería para 2022 si no se implementaba un esfuerzo global masivo, comparable al Plan Marshall, para eliminar el uso de combustibles fósiles en un plazo de cinco años. Sin embargo, estas predicciones no se cumplieron.
A pesar de ello, los defensores del clima continúan señalando que el Ártico podría quedarse sin hielo en algún momento entre 2035 y 2067.
No es ninguna novedad que, desde la década de 1970, diversos científicos y funcionarios han emitido pronósticos alarmantes sobre el medio ambiente que, con el tiempo, han resultado infundados. A continuación, presentamos una lista de diez de las proyecciones más destacadas que no se hicieron realidad.
- En 1970, S. Dillon Ripley, entonces secretario del Instituto Smithsonian y conservacionista, alertó que entre el 75% y el 80% de las especies animales desaparecerían para 1995. Esto no ocurrió.
- Ese mismo año, Kenneth Watt, ecologista de la Universidad de California, Davis, afirmó que el petróleo crudo se agotaría, que la tierra agrícola quedaría inutilizable y que las temperaturas globales descenderían 11 grados para el año 2000. Nada de eso pasó.
- También en 1970, Paul Ehrlich, biólogo de Stanford, predijo que la superpoblación causaría hasta 200 millones de muertes anuales por hambre antes de finalizar la década, que la esperanza de vida caería a 42 años y que la vida en los océanos colapsaría. Un error garrafal.
- Peter Gunter, profesor de la Universidad Estatal del Norte de Texas, vaticinó en 1970 que el crecimiento poblacional superaría la producción de alimentos y que, para el año 2000, el mundo—salvo Europa Occidental, América del Norte y Australia—enfrentaría una hambruna generalizada. No fue así.
- En 1971, S. I. Rasool, científico de la NASA, anunció que una nueva era glacial llegaría en menos de 50 años. Su predicción no se materializó.
- En 1975, Paul Ehrlich volvió a advertir que, en tres décadas, el 90% de las selvas tropicales y la mitad de las especies del planeta desaparecerían. Otra afirmación que no se sostuvo.
- Hussein Shihab, responsable de asuntos ambientales de las Maldivas, afirmó en 1988 que su país estaría sumergido bajo el agua en 30 años, aunque otros expertos también pronosticaron que las Maldivas se quedarían sin agua potable para 1992. Ninguno de los dos escenarios ocurrió.
- En 2004, un informe del Pentágono sugirió que el cambio climático desencadenaría el caos global, con ciudades europeas clave bajo el agua para 2020 y un clima “siberiano” en Gran Bretaña. Una exageración que no se cumplió.
- Bob Woodruff, de ABC News, emitió en 2008 un especial sobre el cambio climático en el que se planteaba que Nueva York podría estar bajo el agua para 2015, junto con otros escenarios catastróficos. Ninguno se hizo realidad.
- En 2009, Al Gore, exvicepresidente de EEUU y figura prominente en el activismo climático, afirmó que el Ártico quedaría libre de hielo para 2014, una predicción similar a la que Thunberg destacó para 2022. Ambas resultaron incorrectas.