En Guatemala, las autoridades han llevado a cabo un operativo el viernes en las instalaciones de la secta Lev Tahor, ubicada en Oratorio, tras recibir informes de abuso infantil generalizado. Según los fiscales, la policía rescató a aproximadamente 200 niños en respuesta a denuncias de violación, tráfico de personas y matrimonios forzados.
Los agentes, junto con psicólogos y fiscales, han tomado bajo custodia protectora a 160 menores y 40 mujeres. La operación en Santa Rosa ha incluido la participación de unos 480 efectivos, quienes también se encargaron de incautar dispositivos electrónicos y buscar evidencias de pornografía infantil.
El fiscal regional, Dimas Jiménez, ha mencionado que estaban contemplando acusaciones que incluían tráfico de personas, maltrato a menores y violación. «Tenemos sospechas de que estos crímenes fueron perpetrados por un miembro de la comunidad», ha declarado.
Nancy Lorena Paiz García, fiscal de la Unidad Contra la Trata de Personas, ha denunciado el descubrimiento de cuerpos que podrían pertenecer a menores de edad en el sitio de la secta. «No hay registros de que hayan usado los cementerios locales para estos entierros», ha afirmado, añadiendo la necesidad de investigar estas muertes.
Este operativo fue desencadenado por la denuncia de cuatro niños no guatemaltecos que escaparon de Lev Tahor en noviembre, revelando a las autoridades los abusos que padecían. «Gracias a los testimonios, las pruebas y los exámenes médicos, pudimos confirmar la existencia de trata de personas, incluyendo matrimonios forzados y otros abusos», explicó García.
Lev Tahor, cuyo nombre significa «Corazón Puro» en hebreo, fue fundada en 1988 en Israel y es conocida por su interpretación extremadamente estricta de la ley judía. La secta ha estado bajo el escrutinio global por acusaciones de abuso sexual, secuestros, matrimonios de menores y violencia física. Tras enfrentar presiones legales en otros países, Lev Tahor se trasladó a México y luego a Guatemala entre 2014 y 2017.
En 2022, las autoridades mexicanas habían intervenido en un campamento de Lev Tahor cercano a la frontera con Guatemala, rescatando a niños y deteniendo a sospechosos por abuso infantil. El reciente operativo en Oratorio añade otro capítulo a la controvertida historia de la secta, donde los menores habrían sido sujetos a matrimonios forzados y abusos bajo pretexto religioso.
Los niños rescatados están ahora bajo la protección del gobierno mientras se profundiza la investigación. La Comunidad Judía de Guatemala ha declarado públicamente que no tiene relación con Lev Tahor, apoyando las acciones de las autoridades y pidiendo colaboración internacional para proteger a los afectados.
«Es imprescindible que los gobiernos y los cuerpos diplomáticos de los países representados en Lev Tahor trabajen juntos para salvaguardar a quienes están en riesgo», expresó la comunidad en un comunicado.
Las autoridades guatemaltecas han indicado que seguirán adelante con la investigación sobre las actividades de la secta y cualquier violación a los derechos humanos que se descubra.
La policía de Guatemala irrumpe en Lev Tahori, un centro judío donde han encontrado a 160 niños y 40 mujeres secuestradas.
Se esperan arrestos masivos contra la comunidad judía, debido a su participación en este centro que usaba a los secuestrados para «trata de personas, pic.twitter.com/syjnuEvG2i
— DeusVult (@DeusVul94229466) December 24, 2024