El ministro de cultura tiene la solución para los jóvenes que jamás tendrán acceso a un trabajo o una vivienda digna

Miles de jóvenes en España no encuentran trabajo, o si lo tienen, cobran míseros suelos que no les permiten llegar a fin de mes y ni tan siguiera tienen la posibilidad de acceder a una vivienda digna (ni en forma de alquiler, ni mucho menos comprarla) gracias al gobierno soc¡alcomun¡sta de Pedro Sánc-Hez y sus socios. Pero tranquilos, que la buena noticia (sírvase la ironía) es que el ninistro de cultura, Ernesto Urtasun, el comun¡sta super-mega-turbo-amigui de la vicepresidente segunda del gobierno y ministro de trabajo, Yolanda Díaz; el antitaurino declarado, acaba de anunciar que, a partir de hoy, los jóvenes ya pueden acceder al ‘Bono Cultural joven’.

Este bono consiste en una ayuda de 400 euros para los jóvenes que hayan cumplido o vayan a cumplir 18 años. Ayuda que podrán destinar a la adquisición y disfrute de productos, servicios y actividades culturales que, según informa el ministerio en su página web, se dividen en tres categorías:

• 100 euros para productos digitales, como suscripciones a plataformas, prensa digital, podcast o videojuegos en línea (esto último muy enriquecedor, culturalmente hablando).
• 100 euros para productos físicos, por ejemplo, libros, prensa o discos.
• 200 euros para artes escénicas: teatro, ópera, cine, danza, museos…

El objetivo que tiene el ministerio de cultura con esta iniciativa tiene, dicen, un doble sentido: «por un lado, muestra el interés de un amplio espectro de la población joven española por la cultura, que esta iniciativa ayuda a fidelizar como público y consumidor cultural de cara al futuro; y, por otro lado, ofrece un respaldo adicional al sector cultural para recuperarse de la crisis».

El ministerio nos recuerda que el Bono Cultural Joven está regulado por el Real Decreto, con vigencia indefinida, que el Consejo de Ministros aprobó el 21 de marzo de 2023, a propuesta del ministro de Cultura. Al igual que en las dos anteriores convocatorias, cuando era titular de este ninisterio el «bailarín» Miguel Iceta – un tipo sin estudios que fue puesto a dedo por Sánchez tras adular al amo y señor públicamente y ahora lo han colocado de embajador de España en la Unesco- cuenta con una dotación de, atención, 210 millones de euros que salen de los Presupuestos Generales del Estado (que pagamos todos con el dinero que nos arrancan de nuestro bolsillo vía impuestos).

Así es como este gobierno pretende «mejorar la vida de la gente», frase que tanto repiten. Sobre todo de la juventud española.

¡Pan y Circo!.