Vamos a tratar de analizar las cosas que están sucediendo alrededor de cualquier noticia relacionada con el mundo agrícola porque están sucediendo cosas muy extrañas. Resulta que los agricultores están protestando contra el gobierno por las claras intenciones que tienen de cargarse el sector, por diversos y oscuros motivos teledirigidos por la UE y el «amigo yanqui».
Hace unos meses, en septiembre del año pasado, nos encontrábamos con que una asociación ecolojeta alemana, Campact, lanzaba una campaña en todo el país para que se boicotearan las fresas españolas porque con su cultivo se contribuía a la desecación del Parque Nacional de Doñana.
Ahora resulta que, en plena campaña de recogida de las fresas de Huelva, todos los medios de manipulación, y aquí es cuando empezamos a sospechar, nos alertan sobre la entrada en España de fresas procedentes de Marruecos con hepatitis A. Curiosamente, los mismos medios que han silenciado las protestas de agricultores, la entrada de producto marroquí de todo tipo y cientos de cosas más relacionadas con la agricultura, nos dicen ahora que cuidado con las fresas marroquíes porque pueden tener hepatitis A. Pero lean con qué tipo de titulares lo hacen.
¿Ven ustedes la palabra «Marruecos» por algún lado? ¿Con qué se va a quedar la gente tan «avispada» que nos rodea en España? Pues con que las fresas tienen hepatitis A. ¿Y a quien va a perjudicar? ¿Solo a la fresa marroquí? No lo creemos. Estamos seguros que la fresa española también va a salir perjudicada porque la gente tiene más miedo que vergüenza y no lee absolutamente nada cuando hace la compra. Sencillamente, van a ver fresas, van a recordar lo de la hepatitis y no van a comprar, sea de donde sea.
Bien visto…