A pesar de lo que se nos intente vender por parte del oficialismo, Pedro Sánchez no puede ni salir a la calle porque es pitado, abucheado e incluso insultado cada vez que pone un pie fuera del coche oficial.
Eso no es algo que nos hayamos inventado nosotros. Eso es algo que ha podido ver cualquiera a través de televisiones y, sobre todo, redes sociales. Sánchez no gusta. Creemos que ni siquiera gusta a los suyos, pero el PSOE es un partido lleno de pelotas que está muy acostumbrado a tragar con lo que haga falta, si a cambio se consigue cualquier puesto con buen sueldo.
Pero ahora se acercan las elecciones y, sorprendentemente, vemos que el PSOE no pierde demasiados votantes e incluso podría llegar a gobernar con coaliciones, por lo que nos cuenta las encuestas que, desgraciadamente, están manipuladas.
Y como hemos dicho muchas veces, no creemos en la limpieza electoral y estamos seguros que, si esa limpieza existiera, el Partido Socialista podría incluso desaparecer del mapa.
Pero tenemos claro que eso no lo van a permitir, porque es uno de los principales partidos agendistas que sufrimos en España. De todas formas cuando se nos ofrezcan los manipulados resultados electorales nos deberían explicar cómo han podido ser posibles con esto que, por ejemplo, se está pudiendo ver en San Fermín.