Si antes publicábamos la tremenda censura que se sufre en las redes sociales, sobre todo antes de las elecciones, ahora vamos a analizar lo que sucede con los políticos del gobierno, o los más cercanos.
¿No les ha pasado a ustedes que, sin seguirlos, no dejan de aparecerles mensajes del Sánchez de turno y compañía entre las sugerencias de mensajes? Desde que se convocaron las elecciones, lo de los tuits de Sánchez ya son un aburrimiento, pero parece que con los de Podemos y compañía está sucediendo lo mismo.
En mi caso, no dejo de ver tuits de Irene Montero. Y no se crean que sigo a este personaje, ni nada parecido. Entre en el momento que entre en Twitter, hay está Irene para intentar venderme una moto.
Hoy, ya no he tenido más remedio que preguntarle… por el precio, claro.
La cosa con la política en España cada vez es más insoportable e inexplicable. No es ni medio normal el grado de manipulación al que se está llegando. Y ojo, que seguramente sea con nuestro dinero.