Analizando los últimos años de España tanto a nivel político, como a nivel social, podríamos decir que hay una España de «antes de Sánc-HEZ» y una España de «después de Sánc-HEZ». Una España que, tras la llegada de este hombre a la Moncloa, ha vivido en una deriva hacia la autodestrucción de todo, inimaginable incluso con los Rajoy, Zapatero y demás empleados monclovitas.
Y es que la degeneración social, política, económica, sanitaria, empresarial, laboral, saqueadora e incluso demográfica está en un punto que nadie pudiera haber llegado a imaginar ni en la peor de sus pesadillas.
Porque son muchas las «hazañas» perpetradas por el presimiente, pero ninguna tan grave y escandalosa como la de los encierros, la de los brebajes experimentales, o la más reciente de las riadas provocadas de Valencia.
A pesar de esos escándalos mayúsculos e inigualables, la colaboración de los medios de manipulación masiva en el despiste promovido desde el gobierno, incluso los más opuestos al régimen, los partidos políticos, incluso los de la supuesta oposición, y la propia sociedad, incluso los más movilizados en contra del PSOE, nos ha llevado a que se hable exclusivamente de los escándalos menores, y que pasen a un segundo plano los que, bajo nuestro punto de vista, son los más graves y dramáticos.
A partir de ahí, es cierto que lo del fiscal, la esposa, el hermano, los amigos, los Aldama, los Koldo, los Ábalos y todo lo que ustedes quieran está fatal. Pero está mucho peor que nos dejemos llevar por esos escándalos, haciéndole el caldo gordo al gobierno, y hablemos exclusivamente de ellos, olvidándonos de que en Valencia todavía hay mucha gente viviendo un drama, que son más que sospechosas las circunstancias en las que se produjo y el número de víctimas, y que en España se sigue muriendo la gente por haber puesto el brazo, gracias a la promoción gubernamental, mientras en medio mundo ya está empezando a aparecer la realidad de los brebajes, sin que aquí hable de ello prácticamente nadie.
Aunque parezca mentira, los escándalos judiciales que salpican a Sánc-HEZ le benefician en este momento porque están dejando en un segundo plano lo más grave que se ha hecho desde que se convirtió en presidente y en la historia más reciente de España.
El vampirismo emocional es la norma en España,unos a otros se dicen mentiras,y ser Juez se convierte en un trabajo penoso.
Nadie quiere perder su empleo,nadie quiere renunciar a un escaño en la política,y la expulsión no existe…aunque a todas luces sean incompetentes,o malversen dinero público.
A decir verdad,otro inconveniente es firmar parte de la Unión Europea,dirigida por una mujer a la que nadie voto,y que solo piensa en inversiones multimillonarias que hay que pagar entre todos,con un exceso de impuestos.
Que es la IA?…pues son los proyectos de l CIA,que tenemos que pagar nosotros.
Y ahora todos a criticar a Trump,sin una voz que critique a China,la verdadera amenaza mundial,todos quieren que terminemos por depender del PCCh?.Donde los chinos para encontrar empleo tienen que hipotecarse para comprar ropa de lujo,y si no…no les dan empleo y esto está causando una ruina en las ciudades chinas,por qué les cuesta devolver el crédito,un gran absurdo.
Latinoamérica,África y otros paises lamentan haber pactado con China.
Y ahora los medios de desinformación están nerviosos…que tal si Trump mete en la cárcel a Zapatero?…pues todos muy nerviosos defendiendo a los socialistas.
La derecha española está formada por caciques hace cientos de años,jamás subirían los sueldos o las pensiones.
Españistan solo tiene políticos repulsivos.