Durante el 55º encuentro anual del Foro Económico Mundial (FEM) el martes, Scholz hizo estas declaraciones autoritarias, lo que generó una amplia respuesta en las redes sociales, incluyendo críticas por parte de Elon Musk.
«En cuanto a mis interacciones con Elon Musk, he tenido mucho que decir porque él ha hablado mucho sobre Europa», mencionó Scholz a la audiencia, mientras el fundador del FEM, Klaus Schwab, se encontraba a su lado.
«Quiero reiterar que en Europa y en Alemania la libertad de expresión es un derecho de todos, incluso de los multimillonarios. Sin embargo, no toleramos que se utilice para apoyar a la extrema derecha. Ese es mi mensaje de nuevo», añadió.
«Libertad de expresión», según Olaf Scholz. pic.twitter.com/RTBum8Lwj8
— javiersobrevive #ED👍🇪🇸 (@jsobrevive) January 22, 2025
Estas palabras fueron una reacción al apoyo que Musk había mostrado recientemente hacia el partido alemán de derecha AfD, elogiando su postura contra la inmigración masiva y su inclinación hacia un gobierno populista.
En respuesta, Musk se expresó en X, diciendo: «¡Vergüenza debería darle a Oaf Schitz!»
Shame on Oaf Schitz! https://t.co/xtdW8D6FTo
— Elon Musk (@elonmusk) January 21, 2025
Este intercambio ocurre justo después de que el ex comisionado de la UE, Thierry Breton, reconociera que la UE había manipulado las elecciones en Rumanía para impedir que el vencedor, Călin Georgescu, llegara al poder, advirtiendo que podrían tomar medidas similares en Alemania si la AfD triunfara en las próximas elecciones del próximo mes.
«Actuamos en Rumanía y lo haremos en Alemania si es necesario», se tradujo de su reciente entrevista en medios europeos.
La AfD se posiciona para hacer notables ganancias en las próximas elecciones alemanas, impulsada por el descontento con las políticas de apertura de fronteras, censura y la agenda woke del gobierno socialista actual, según una reciente encuesta.
Afirmar que se apoya la libertad de expresión, pero con excepciones, es un ejemplo claro de manipulación y desprecio por la realidad por parte de un político desconectado.