Por Alfonso de la Vega
El biógrafo y filósofo Plutarco vivió una época con cierto parecido a la actual, de crisis espiritual y cultural, crucial para la evolución de las ideas fundamentales de Occidente, que chocan con lo nuevo importado y en el que las instituciones existentes, que hoy están siendo desmanteladas por quienes más obligación tendrían de defenderlas, se desnaturalizan y actúan contra su razón de ser o el propio pueblo. De Plutarco disponemos de obras de gran interés como las Morales, en la que destaca su tratado Isis y Osiris, importante para comprender mejor la espiritualidad de su época, pero más aún las famosas
Vidas paralelas en las que comparaba personajes célebres. En un intento de imitar sus biografías podemos asociar las de dos lideresas ilustres muy unidas hoy por su ambición y nepotismo. Merecen unas Vidas paralelas a lo plutarquiano.
“Teresa Ribera, a la cárcel la primera”
Tal era el lema de una reciente manifestación en Madrid. Pero no se ha cumplido tan justo o razonable deseo y en cambio ha sido ascendida en el escalafón maléfico, en este caso europeo. Creo que es evidencia de razón que con Ribera nos encontramos ante un personaje tenebroso. Si la cara fuese el espejo del alma su feroz faz de garduña o fanática bilduetarra de pura raza vasca, aunque no lo sea, nos daría alguna pista de lo que cabe esperar de su desempeño catastrófico, de no ser acaso delictivo con resultado de desolación y muerte.
Con tal trayectoria no es tan de extrañar que sea acogida con satisfacción en el seno comisionista europeo de otra espantosa lurpia, la von Leyen otra individua de conciencia negra que ojalá no pueda seguir burlando en el futuro la acción de la Justicia. Pero el caso es que Ribera ha ascendido en el escalafón hasta una vicepresidencia de la comisionista alemana.
Falta de cualificación profesional en la materia, ni es ingeniero ni científico sino de Letras, sí posee el mérito nepotista de ser la nuera de Bacigalupo. Se muestra muy jaque y empoderada postiza en los complejos temas de energía o medioambiente, sin olvidar la estafa del cambio climático, de modo que se permite destruir la economía real y la naturaleza españolas por orden de sus amos con el pretexto absurdo pero que la prensa mercenaria vende bien de la cosa ecologista y lo de la energía verde que lo mismo vale para un roto que para un descosido. Una variante mohatrera del timo de la estampita.
Fanática de la “descarbonización”, que dudo tenga capacidad intelectual ni científica para saber lo que significa ni menos sus implicaciones en la actividad económica real ni en los ecosistemas naturales, se la ve muy bien amaestrada en el ámbito de complacer al poderoso, acaso gracias al ejemplo de su suegro el juez Enrique Bacigalupo de tan penosa memoria para la libertad y la ley en España. El marido de Teresa, Mariano Bacigalupo, posee una dilatada carrera en instituciones de control relacionadas con la devastadora vicepresidencia de su mujer, entre ellas: Consejero de la Comisión Nacional del Mercado y la Competencia. Ha sido Miembro del Consejo de Reguladores de la Agencia de Cooperación de los Reguladores de la Energía de la Unión Europea. Ex Secretario del Consejo de la Comisión Nacional de la Energía…
La elegida pastoreaba una vicepresidencia en el gobierno de Su Majestad cuyo mismo terrorífico nombre resulta un homenaje al maltusianismo eugenésico más feroz: “Transición Ecológica y Reto demográfico.” Transición ¿hacia dónde? ¿Hacía la Edad de Piedra y las hambrunas? Y reto demográfico ¿con mostrada vocación de exterminio al servicio de la Agenda 2030 y el Plan Kalergi? Sin lugar a ninguna duda ha mostrado sus méritos malthusianos en la catástrofe valenciana que cuyas acciones y deserciones ha ayudado a provocar.
Su capacidad de devastación demostrada es notabilísima por lo que el nuevo cargo lo tendría más que merecido como premio a la destrucción conseguida y a su actividad como agente comercial de los monopolios agiotistas a los que sirve con tanta dedicación y entusiasmo tanto la PSOE como su familia. En su pío afán de crear la demanda surge la duda de que la actual catástrofe sea muy oportuna para poner en valor como se dice ahora el liberticida Plan de acción de Estrategia urbana de Valencia, o la siembra de paneles solares sobre los campos arrasados. Sin embargo, el actual desastre levantino paradójicamente en vez de estorbar sus planes de ascenso en la cordada mercenaria agendista le ha permitido salir reforzada con nuevos e importantes méritos. Al parecer, el trapicheo de cargos entre las diferentes bandas ha dejado la cláusula de salvaguarda de no ser procesada.
Úrsula, satánica
Otro personaje digno de toda sospecha y objeto de investigaciones judiciales es su nueva jefa la Von Leyen. El Tribunal General de la Unión Europea (TGUE) ha invalidado la escandalosa decisión de la Comisión Europea de mantener en secreto ciertas partes de los contratos de vacunas del Covid. Se trataría de ocultar el trapicheo de la presunta comisionista y cómplices en la estafa de las vacunas. O dicho en lengua «politiquesa» su gestión se vio empañada por la «falta de transparencia». El fallo del TGUE concluye que la Comisión Europea no proporcionó suficiente acceso a los acuerdos de compra y señala que la publicación de versiones redactadas de los contratos contiene irregularidades. El Tribunal determinó que la Comisión «no demostró que un acceso más amplio a esas cláusulas perjudicaría realmente los intereses comerciales de esas empresas». Sin embargo, no penetra más en lo verdaderamente ocurrido por lo que la presunta comisionista se va de rositas. Conviene un pequeño ejercicio de memoria democrática histórica.
La denuncia penal contra la señora von der Leyen se centraba en el contrato de 20 000 millones de euros –potencialmente de 35 000 millones– mediante el cual la Unión Europea compró a Pfizer ingentes cantidades de supuestas “vacunas” anticovid a nombre de los países miembros de la UE. La denuncia se basaba en un intercambio de SMS, revelado por el New York Times, entre la presidente de la Comisión europea, Úrsula von der Leyen, y el principal responsable de Pfizer, Albert Bourla.
El contenido de esos SMS parece ser particularmente “sensible”. El periodista Alexander Fanta, trató inútilmente de obtener una copia de esos mensajes, las gestiones en ese sentido de la Defensora del Pueblo Europeo tampoco han tenido resultados y el New York Times finalmente presentó contra la señora Úrsula von Leyen una denuncia basada en la Carta de los Derechos Fundamentales de la Unión Europea, que reconoce el derecho de acceso a los documentos del Parlamento Europeo, del Consejo Europeo y de la Comisión Europea.
Según el economista y empresario francés François Ducrocq: “Úrsula van der Leyen, nuestra principal compradora de cientos de millones de dosis de vacunas, resulta tener un marido, Heiko, que dirige Orgenesis, una empresa de biotecnología especializada en terapia génica. Ahora todo ha quedado claro”. Y es que la cosa se entiende mucho mejor si tenemos en cuenta que su propio marido Heiko von der Leyen se convirtió de repente en administrador de Orgenesis, firma que ha tenido un gran papel en la campaña de vacunación contra el Covid-19 en los países de la Unión Europea. Como decía el fabiano lord Keynes “antes de vender algo asegúrate de crear tu propia demanda”. Unos fabrican el temido veneno y otros lo imponen al obligar a ponérselo.
Sin embargo, aunque el porcentaje de las comisiones fuese más pequeño en la UE que en el reino de España estaríamos hablando de un montante de quizás unos 35.000 millones para Pfizer. En 2022, la Comisión Europea asignó a Orgenesis millones de euros en varias subvenciones. Cuando se reveló la existencia de esas subvenciones europeas a Orgenesis, el marido de la señora von der Leyen renunció al cargo que ocupaba en esa firma.
Cabe recordar que este no es el único gran escándalo de la alemana. Venía ya entrenada. La incompetencia de Úrsula von der Leyen fue obvia para todos, especialmente después de que resultó que casi la mitad de las páginas de su tesis doctoral en medicina estaban plagiadas o contenían fuentes citadas incorrectamente. Me recuerda a otro doctor, íntimo de la interesada.
Como ministra alemana de Defensa la protegida de la no menos siniestra Merkel habría demostrado habilidades notables en el campo de la corrupción. En diciembre de 2018, el Bundestag alemán inició una investigación sobre Úrsula von der Leyen, quien fue acusada de corrupción, mala gestión y nepotismo en la asignación de contratos y la contratación de consultores.
La Oficina Federal de Auditoría de Alemania encontró decenas de irregularidades en la contratación de consultores externos por parte del Ministerio de Defensa. Según lo publicado, en 2015 el Ministerio de Defensa alemán gastó 100 millones de euros en consultores externos, pero anunció oficialmente 2,2 millones. Un año después, el Ministerio gastó 150 millones de euros en consultores, declarando solo ¡2,9 millones de euros!
Después de analizar 56 de los 375 contratos adjudicados a consultores en 2015-2016, los auditores encontraron que, en la gran mayoría de los casos, Defensa no proporcionó motivos suficientes para decidir sobre la necesidad de asesoramiento externo. En más de un tercio de los casos, los procedimientos no cumplieron con las reglas normales de contratación.
Cabría resaltar también su escandaloso papel belicista actual en la crisis de Ucrania que pudiera llevar a Europa a la más terrorífica devastación total. Con estos dirigentes no necesitamos más enemigos.
La corrupción se ha convertido en uno de los mayores instrumentos de promoción y estabilidad institucional de las actuales democracias degeneradas. Estos nombramientos resultan ser una pésima noticia para la paz, la prosperidad y el bienestar de los traicionados y sometidos pueblos de Europa.
Humillado el noble sentimiento de patriotismo, ayunos de valores morales, el derecho tampoco es obstáculo contra los deseos de los poderosos. El Mal los cría y el globalismo de la Agenda 2030 los junta.