En primer lugar quiero aclarar que esto es un artículo sobre la posible muerte de una persona que soy yo y que gracias a Dios no se produjo, pero como faltó poquísimo para que así fuera pues lo quiero dejar claro aquí antes de empezar, para que no haya malentendidos: si estoy vivo es gracias a Dios y a la Santísima Virgen María y no gracias a la Inspección de Trabajo de Cantabria, que es uno de los organismos más inútiles y absurdos que me he encontrado en este régimen de organismos inútiles, que sólo sirven para engañar a los españoles haciéndoles creer que hay una estructura estatal que les protege de no sé qué.
Nos tenemos que remontar a una tarde de hace algunos años, cuando sufrí un accidente laboral que todavía sigue impune gracias a la incompetencia de muchísimas personas que tenían que haber impedido que eso sucediera y haber perseguido los flagrantes incumplimientos de las leyes más mínimas de seguridad en el trabajo. Por esto lo voy a contar como si de verdad se hubiera producido, ya que así pudo ser gracias a esta basura de instituciones que tenemos y a lo inepto y cabrón que fue el causante de mi percance. De hecho, el contexto de este relato tiene todo que ver con un personaje tramposo y falso que intentó y sigue intentando por todos los medios colar su versión de que yo nunca estuve en su empresa y que prácticamente ni me conocía. De hecho, estoy convencido que de haber quedado muerto o malparado hubiera intentado incluso sacarme de su nave (de pinturas y paramentos en Camargo) y me hubiera tirado por ahí. Y no lo digo en broma.
Por cierto, Roberto: si lees esto, te quiero decir nuevamente que eres un trilero y un retrasado y que pronto me vas a tener que pagar las secuelas que sufrí en tu nave y que me llevó un año entero superar. Da las gracias a la mierda de Justicia que tenemos por haber dilatado sine die esta situación, pues con Felipe VI y sus políticos los granujas vivís de PM.
Lamentamos comunicarles que nuestro colaborador habitual, Miguel de Cervera, ha fallecido el pasado sábado 11 de julio de 2020 en lo que parece ser un accidente, aunque su muerte se está investigando. Su cuerpo sin vida fue hallado en el Polígono Industrial de La Venta, en Igollo de Camargo. Llevaba fallecido varias horas cuando fue encontrado por casualidad, por un viandante, después de que su familia reportara su desaparición. Su teléfono daba señal, pero no contestaba las llamadas ni los mensajes.
Acudía a una reunión de trabajo en una nave de pinturas y anexos en Igollo de Camargo
La Policía sospecha que Miguel sufrió algún tipo de accidente de tipo laboral, en las inmediaciones de una nave industrial de pinturas y anexos. Una empresa que estaba en plena mudanza y a la cual había acudido para una reunión de trabajo con un cliente que es el responsable de dicha nave y que le había convocado allí. Éstas son las últimas noticias que tenemos. Una empresa de pinturas y paramentos en Camargo cuyo responsable ha negado que Miguel llegara a dicha nave y, aunque le pareció extraño que no acudiera a la cita que tenía en esta tarde, ni que llamará para disculparse, cómo sería lógico en un proveedor servicios con el que se iba a reunir, no le llamó para saber qué había pasado.
El desolado paraje industrial donde se encontró el cadáver de Miguel de Cervera
La situación no cuadra con un accidente de tráfico: se piden testigos
El cuerpo sin vida presentaba contusiones muy fuertes, inclusive una en el cuello, que fue la que le provocó la muerte. Por esto se baraja el accidente de tráfico como causa del deceso, con fuga del conductor, aunque la situación del cuerpo no cuadra, ya que éste se encontró fuera de la calzada, lo que abre otras hipótesis posibles. Se ha decretado secreto de sumario y se pide a la ciudadanía que, si tienen datos sobre lo que haya podido suceder, los faciliten cuanto antes a las autoridades.
Como se ha matado en la obra hay que decir que sí tiene derecho a que investiguen su muerte, cosa que no hubiera sucedido de haberse quedado medio muerto. Es la única nota positiva de todo esto.
Un investigador comprometido asesinado por un subnormal
Desde El Diestro queremos rendir homenaje póstumo a un hombre sencillo que vivió libre, amante de su libertad y de su Patria, pero que fallecido de forma tan trágica cuando se dirigía a trabajar en esta nave de pinturas y anexos en Cantabria. Todo por culpa de un retrasado mental que tiene una forma de trabajar muy peligrosa y por unas autoridades laborales que son una completa basura.
Sus seguidores destacan su compromiso con la información libre, siempre al lado de las víctimas de toda tiranía, de la injusticia social, el crimen y los abusos del poder. Y siempre diciendo muchas verdades sobre los traidores degenerados del PP. Por todo ello fue censurado en muchas ocasiones, por emitir opiniones e informaciones siempre basadas en datos, aunque él lo asumía como parte de su vocación periodística. Una noble profesión que jamás le reportó ni un céntimo, pese a sus numerosas e inéditas investigaciones, muchas veces asumiendo riesgos personales. Una labor que siempre es ingrata y poco reconocida para los riesgos que conlleva, pero su vocación le llevó igualmente a acusar a las más altas instancias del Estado y los poderes fácticos de ciscarse literalmente encima de los españoles y de todo el mundo.
Simpático meme que le hicieron los seguidores de sus vídeos y artículos, haciendo una broma con su aversión a ser cómplice del Poder
Una vida naufragada
Se nos ha ido con muchos trabajos por terminar, muchos más artículos por escribir e incluso un libro póstumo, Los cuatro naufragios del Capitán, sobre un antepasado suyo que curiosamente murió también de manera violenta y misteriosa hace más de 100 años. Cosas de la vida y de la muerte, trabajaba en este libro cuándo sucedió su fallecimiento. Pero no es la única cruel ironía que deja atrás.
Ironías de la vida y de la muerte. Resulta que este compañero tenía un compromiso en especial con los accidentes laborales, habiendo sido víctima de otro percance laboral en 2019, el cual fue motivo de su artículo de protesta Cantabria Infinita… Miseria https://www.alertanacional.es/cantabria-infinita-miseria/. Y logró demostrar que su denuncia contra el hotel en el que sufrió los daños era más que fundada, lo que consideró una victoria sobre este problema de la inseguridad laboral, del que Miguel hacía responsable directo a la poco resolutiva Inspección de Trabajo de Cantabria: sólo tardaron 5 meses en investigar su denuncia, lo que se considera un plazo récord. Y solamente se pudo ganar el juicio en unos pocos 5 años.
Kevin Reguero fue literalmente asesinado por la inexistente política de prevención de accidentes laborales de la mayoría de empresas y la absurda Inspección de Trabajo. Está claro que sobramos personas en el mundo. Es sólo una de tantas víctimas que estas instituciones ridículas, que ni inspectores tienen apenas, dejan atrás. Solamente en una fábrica de Cantabria se han muerto 2 trabajadores en menos de un año.
No deja de ser una macabra casualidad que precisamente en el aniversario de ese accidente haya sufrido otro, como mínimo in itinere, y desde aquí que dimos pedir a los posibles testigos, inclusive a estos señores de la nave de pinturas y anexos en Camargo, hacia la cual se dirigía Miguel de Cervera, para que por favor faciliten cualquier dato que pueda esclarecer este extraño accidente. Y es que el cuerpo sin vida de Miguel se encontraba muy próximo a la nave que era su destino, en lo que insistimos por si acaso hubiera habido testigos. El polígono, de hecho, se encontraba vacío salvo en la nave señalada, donde se efectuaba una mudanza.
No dejemos que los corruptos «empresarios» que la inoperante Inspección de Trabajo de toda España produzcan tantas muertes al año que nadie quiere evitar.
Descanse en paz nuestro compañero y esperamos que se haga justicia y que la Policía encuentre cuanto antes a los cobardes responsables de su muerte y abandono en una cuneta. Y terminamos con uno de sus versos, como panegírico de su corta vida.
