Por Alfonso de la Vega
Dentro de la revolución cultural maoísta en curso por el gobierno iconoclasta de Su Majestad se encontraría el proyecto de derribar la gran Cruz de 150 metros que se yergue sobre el risco de la Nava en el Valle de los Caídos. Sería un trofeo magnífico para presentar a sus amos. A estos derribos de cruces se ha sumado el PP de Feijoo. Así en ayuntamientos dominados por ellos el PP confiesa pusilánime que es cómplice porque “lo exige la ley”. La señorita Ayuso que pudiera tener en la mano una baza decisiva para salvar la cruz de la vesania socialista, y a la que algunos ilusos mal informados consideran una especie de nueva Juana de Arco sin armadura, prefiere no hacer nada que perjudique su ambición.
Menos mal que en alguno de los casos un buen juez ha salido en valiente defensa de los símbolos presuntamente amparados por la libertad religiosa proclamada en la constitución. Veremos a ver al final qué pasa aunque teniendo en cuenta lo que sucede en el reino de España nos podemos temer lo peor. En efecto, el momento presente es especialmente peligroso. El falsario presidente del gobierno se encuentra en horas bajas. Temeroso del «efecto Trump» necesita algún sonado golpe de efecto que le permitiese recuperar autoridad y prestigio sobre el abigarrado contubernio gubernamental borbónico.
Con Bergoglio medio gagá, hoy el Vaticano es un nido de pretendientes que maquinan intrigas a la espera de heredar. Aquí nuestros obispos prefieren hacerse los distraídos que no están los tiempos para heroicidades y en su momento los rojos ya perpetraron toda una escabechina. La penúltima escaramuza ha sido el cese del prior benedictino Santiago Cantera que hasta ahora había defendido con gran competencia y valentía tanto la cruz como la sacralidad del recinto. En la banda socialista esta sustitución ha sido celebrada con enorme alborozo como un paso previo a su pretendido programa de destrucción. Responsabilizando a la Orden benedictina de Molesme, el cardenal Cobo también quiere hacer méritos y se lava las manos como Pilatos. Pero mucho me temo que estaría dispuesto a entregar la cruz al brazo secular si así lo exigiese el guión y le beneficiase cara al próximo cónclave. De momento, algo incoherentemente con su supuesta falta de jurisdicción, habría acordado con el falsario desacralizar el conjunto, dejando a los benedictinos como una especie de okupas en precario.
La posición de la Iglesia tradicional
No deja de ser curioso que tenga que ser un simple laico quien se vea obligado en conciencia a recordar algo tan patente como que el Valle no es como se pretende una apología del franquismo sino un recinto de profundo sentido espiritual. Aunque la actual Iglesia española no se da por aludida conviene recordar la postura tradicional de la Iglesia sobre el verdadero significado del Valle.
El Papa Juan XXIII resumió las líneas maestras de la espiritualidad de este monumento en el breve pontificio de 1960 por el que concedió el título de Basílica Menor a la iglesia de Santa Cruz del Valle de los Caídos. Dice así:
“Yérguese airoso en una de las cumbres de la sierra de Guadarrama, no lejos de la Villa de Madrid, el signo de la Cruz Redentora, como hito hacia el cielo, meta preclarísima del caminar de la vida terrena, y a la vez extiende sus brazos piadosos a modo de alas protectoras, bajo las cuales los muertos gozan el eterno descanso.
Este monte sobre el que se eleva el signo de la Redención humana, ha sido excavado en inmensa cripta, de modo que en sus entrañas se abre un amplísimo templo, donde se ofrecen sacrificios expiatorios y continuos sufragios por los Caídos en la guerra civil de España, y allí, acabados los padecimientos, terminados los trabajos y aplacadas las luchas, duermen juntos el sueño de la paz, a la vez que se ruega sin cesar por toda la nación española”.
En nombre del Papa Juan XXIII el cardenal Cicognani, explicó en la homilía de la Misa de consagración de la Basílica el 4 de junio del año 1960, varias cuestiones: “Contiguo a la Basílica, se ha edificado un gran Monasterio destinado a una Congregación religiosa, puesta al servicio de los fieles, y se ha escogido para ello una Comunidad de la Orden de San Benito, que tiene la peculiaridad de unir a la dispensatio donorum Dei la obligación de la laus perennis, por la cual la Nación española rezará diariamente con la Iglesia, para la Iglesia, en nombre de la Iglesia. […] Esta Basílica, al igual que toda otra Basílica, debe ser un centro de irradiación espiritual, un santuario adonde se dirijan los sentimientos de adoración y veneración de los fieles. Esta Basílica, dedicada a la Santa Cruz, debe ser como un místico recinto donde las almas se encuentren en su propia atmósfera para meditar los misterios de Dios, especialmente el de la Redención. Cristo crucificado, que se alza aquí en el altar mayor, en una pieza de arte admirable, y en la cumbre de la montaña la altísima Cruz, lanzada a los espacios cual flecha que señala el cielo, como señal de esperanza y garantía de salvación; una cruz que domina todo el valle y lo ilumina cual faro de luz redentora. […] Frente a la Cruz, salen al paso a nuestro espíritu el pensamiento y la doctrina de San Pablo en su Carta a los fieles de Colosas acerca de Cristo y del sacrificio de la Cruz, en el cual ve San Pablo la redención y la reconciliación del género humano con Dios, y la pacificación de todas las cosas, tanto en el cielo como en la tierra, merced al primado que sobre todas las cosas tiene Cristo”.
El cardenal recuerda las finalidades espirituales para las que ha sido construido el monumento que no es la gloria del franquismo sino que posee una dimensión espiritual: ofrecer sufragios por las almas de los muertos o rezar por la Nación española. El lunes se celebra la sesión plenaria de la Conferencia episcopal. No es previsible que haga nada por acatar y defender la visión tradicional fijada por el papa Juan XXIII y su representante el cardenal Cicognani. Se puede consumar así la traición. Con la amenaza socialista que aquí adquiere caracteres satánicos no está de más recordar estas cuestiones. Al parecer se pretendería plagiar un monumento alemán relacionado con el Holocausto, por el que se asociaría en el subconsciente del ignorante o desavisado a las fuerzas patrióticas liberadoras del dominio rojo perseguidor de católicos con los nazis. Contra la damnatio memoriae que el gobierno frente popular borbónico está perpetrando gracias a complicidades y cobardías impensables cabe revindicar el valor perenne de los símbolos espirituales en la iluminación de la conciencia.
La montaña y la caverna son símbolos de centros espirituales como lo son todos los axiales o polares, como la montaña. En el profundo simbolismo espiritual del Valle de los Caídos la caverna basilical se encuentra en el corazón de la montaña en Cuelgamuros. La “caverna del corazón” es una notable expresión tradicional para designar el centro vital. Nuestro gran Cervantes une a ambos en el episodio memorable de la Cueva de Montesinos donde Montesinos conserva el corazón del caballero Durandarte muerto en combate.
Antes de terminar conviene recordar más referencias simbólicas, así la del Apocalipsis. La idea de que el Mal pese a todo no prevalecerá. Junto al Altar cuatro arcángeles parecen aguardar el cumplimiento de esta esperanza. Además de los tres habituales, Gabriel el que anuncia, Rafael el peregrino, o Miguel el combatiente, se presenta un cuarto que aparece en los apócrifos. Quizás sea Uriel, el Fuego de Dios, o más probablemente Azrael o Yezrael. Existe una historia considerada apócrifa en 2 Esdras. La de un escriba y juez llamado Ezra o «Azra». El tal Azra fue visitado por el arcángel Uriel quien le dio una lista de leyes y castigos que aplicar como juez. Azra vuelve aparecer en los textos apócrifos entrando al Cielo sin probar la marca de la muerte. Tendría así un carácter de agente psicopompo, no muy diferente del Anubis egipcio. Se trataría del agente que presenta a los difuntos ante Dios y por tanto de gran coherencia con el profundo simbolismo espiritual del propio conjunto monumental hoy amenazado.
Para los que los asuntos religiosos no les sirvan tampoco estaría de más que recordasen las palabras de Azaña en su famoso discurso de 1938 en el ayuntamiento de Barcelona:
“Pero es obligación moral, sobre todo de los que padecen la guerra, cuando se acabe como nosotros queremos que se acabe, sacar de la lección y de la musa del escarmiento el mayor bien posible, y cuando la antorcha pase a otras manos, a otros hombres, a otras generaciones, que se acordaran, si alguna vez les hierve la sangre iracunda y otra vez el genio español vuelve a enfurecerse con la intolerancia, y con el odio y con el apetito de destrucción, que piensen en los muertos y que escuchen su lección: a de esos hombres, que han caído embravecidos en la batalla luchando magnánimamente por un ideal grandioso y que ahora, abrigados en la tierra materna, ya no tienen odio, ya no tienen rencor y nos envían, con los destellos de su luz, tranquila y remota como la de una estrella, el mensaje de la patria eterna que dice a todos sus hijos: Paz, Piedad y Perdón”.
Entendemos que los políticos españoles no son Católicos.La malloria son de los Testigos de Jehová o Evangelisticos,o directamente no tienen más religión que las sectas,donde practican la adoración de símbolos pakistaníes/paganos o rezan a Buda,y hacen yoga.Herejias de ‘los elegidos’.
Franco nos dejó un gran legado,por qué en el fondo siempre fue una buena persona,que se dejó la piel por España,nunca tuvo tan mala saña como Azaña ni fue un asesino como Carrillo.
Que vamos a saber nosotros sobre los Honoris Causa?.
Entonces a tirar embalses útiles,de ingeniería española envidia de otros países,que producían energía hidráulica gratis para su funcionamiento,habían peces y se podía pescar.Tan solo por que no los hicieron los marxistas,que se dedicaron a robar el oro de España y poco más.
El Valle es una cosa increíble que tenemos todos los españoles,y lo tenemos en el Centro de España,es patrimonio de todos,al margen de su inclinación política,una Monumental obra de Arte español.
Y ahora en que lo quieren convertir?,en un parke de atracciones socialista,un parke del terror,haciendo una tergiversación de la historia poniendo salas de las víctimas de genocidios,sobra decir que nada de las checas ni del genocidio más grande de la historia,perpetrado por Stalin.
Y por qué o para que?,para seguir robando,está vez a través de una empresa encargada de esta ocurrencia,empresa que ya está siendo investigada,por corrupción donde hay implicados Ministros del PSOE.Y claro donde hay dinero allí está también el PP.
Unidas Podemos se han hecho islamistas incluso yihadista,entonces el PSOE por sus pactos roza el extremismo.
Santiago Cantera un gran Teólogo,gran Prior, escritor,hombre sabio y prudente ha sido expulsado.
Tanto en las abadías benedictinas, como en los conventos carmelitanos, ello se expresa, por ejemplo, en la difusión del canto litúrgico, y el debido cuidado de todo el Culto; y, también, en la confección de ornamentos sacerdotales, y la preparación de otros productos (como dulces), que son vendidos como ingresos, para el sostenimiento de dichas instituciones. Numerosas religiosas, de diversas congregaciones, se empeñan en el servicio de la educación, de los pobres, de los ancianos, de los enfermos. Ellas señalan la presencia de la Iglesia en el mundo, son la novedad del Evangelio en medio de los hombres. Es ésta una realidad eclesial, independientemente de la política religiosa que profese el pontificado. Los gobiernos seculares saben respetar ese aporte de la Iglesia, salvo los regímenes totalitarios, que suelen perseguirla.
Además del aporte de las congregaciones religiosas, la concepción cristiana de la sociedad incluye la consagración de la mujer en el matrimonio y su papel de madre: la “tecnogonía”, engendrar y educar hijos (1 Tm 2, 9 ss.). Es el servicio básico que sostiene a la humanidad sobre la Tierra.
Detrás del perfil de toda mujer, también de las religiosas consagradas, se encuentra la figura bíblica de Eva (Jawwâh), madre de todos los vivientes. La tecnogonía procede de las primeras páginas del libro del Génesis.