La agresividad de un activista catalán, experto en violencia de género, con una camarera en México

Un suceso escandaloso ocurrido el pasado 25 de febrero ha puesto en el centro de la atención pública a un tal Joan Serra Montagut, un activista y periodista catalán conocido por su especialización en violencia de género. Sin embargo, lejos de abogar por la causa que dice defender, Serra Montagut enfrenta una investigación por parte de las autoridades de Mérida, México, tras ser acusado de destruir una cafetería local y amenazar a una camarera.

El altercado tuvo lugar en una pequeña cafetería de Mérida, donde Serra Montagut, que se alojaba como huésped de un Airbnb cercano, exigió a la empleada que bajara el volumen de la música. Al negarse la camarera, el activista, según testigos y videos que circularon rápidamente en redes sociales, reaccionó de manera muy violenta, destruyendo objetos en el establecimiento y profiriendo amenazas. En un momento de la confrontación, Serra Montagut habría presumido de tener contactos políticos que le permitirían evadir cualquier consecuencia, lo que exacerbó la indignación de los presentes.

Lo que agravó aún más el caso fue la afirmación de Serra Montagut de estar afiliado a la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO). Días después, la oficina de UNESCO en México emitió una nota aclaratoria a través de su cuenta oficial en X desmarcándose del activista. En el comunicado, acompañado de una imagen oficial, la organización reafirmó su “rechazo y condena a cualquier tipo de violencia contra las mujeres” y subrayó su política de “cero tolerancia” hacia la violencia de género, aclarando explícitamente que “el Sr. Joan Serra Montagut no es miembro ni colaborador de la UNESCO.” Pero lo cierto es que este individuo sí tuvo relación con dicho organismo ya que fue colaborador con la UNESCO en distintas iniciativas culturales además de consultor del Programa de las Naciones Unidas para una Cultura de Paz en Chiapas.

El suceso, que rápidamente se viralizó, desató una ola de reacciones en redes sociales, con usuarios mexicanos expresando su condena y cuestionando la credibilidad de Serra Montagut, quien, según reportes previos, había trabajado como consultor para programas de Naciones Unidas y representaba la cultura catalana en Yucatán. Algunos internautas señalaron la ironía de que un supuesto experto en violencia de género estuviera involucrado en un acto de agresión contra una mujer, mientras otros exigieron acciones concretas para responsabilizarlo.

En este vídeo, grabado por la cámara de seguridad de la cafetería, se puede observar el comportamiento violento del catalán «experto en violencia de género»:

En este otro vídeo se ve cómo, inmediatamente después de pedir disculpas ante una cámara, el animal arranca salvajemente la cámara de una reportera exigiendo que no se le grabara:

Las autoridades locales de Mérida han iniciado una investigación para determinar las responsabilidades de Serra Montagut, quien enfrenta posibles cargos por daños, amenazas y violencia. Mientras tanto, la dueña de la cafetería y la camarera afectada han recibido apoyo de la comunidad, que espera que se haga justicia. El caso también ha generado un debate más amplio en México sobre el comportamiento de algunos extranjeros que residen en el país.

Antes del altercado, este individuo era conocido por su activismo, apariciones en programas de radio españoles y premios recibidos por su trabajo en cuestiones de género. Sin embargo, los videos y testimonios que han surgido han evidenciado su hipocresía y su nulo  compromiso con los valores que dice defender.

A medida que la investigación avanza, el caso de Joan Serra Montagut no solo pone en evidencia un acto de violencia individual, sino que también invita a reflexionar sobre la responsabilidad de los activistas y el impacto de la conducta personal en la credibilidad de causas globales. En Mérida esperan que se haga justicia.