El aumento de la inflación ha convertido la celebración de una boda en un verdadero desafío financiero para muchas parejas en España. Según datos de Menudaboda.com, un portal de referencia en noticias e información sobre bodas, el coste medio de un enlace ha subido un 13% en el último año, situándose en 23.750 euros. Este encarecimiento ha llevado a muchas parejas a endeudarse para poder costear su gran día, ya que los regalos de los invitados difícilmente cubren el gasto total. El costo de las bodas se dispara en nuestro país y las parejas se lo piensan más, como es lógico, a la hora de dar este paso.
Un banquete que cuesta más que un coche
El mayor golpe al bolsillo proviene del banquete, que ya supone de media 10.600 euros, con un coste por invitado de 196 euros. Si a esto se suman los precios en alza de vestidos de novia (hasta 2.000 euros, con previsión de subir un 15% en 2025) y trajes de novio (incremento del 5-8%), la factura final se dispara.
Bodas más pequeñas y préstamos al rescate
Para contrarrestar esta escalada de precios, muchas parejas han optado por reducir la lista de invitados, pasando de celebraciones de 150-200 personas a eventos más íntimos con 70-100 asistentes. También han comenzado a prescindir de lujos como cortadores de jamón o músicos en vivo.
Sin embargo, lo más preocupante es el crecimiento de la financiación de bodas. Cada vez más parejas recurren a préstamos personales para costear el evento, asumiendo deudas que pueden tardar años en saldar. La previsión no es alentadora: posponer la boda sólo encarece aún más el evento, ya que los precios seguirán en ascenso en 2024 y 2025.
A pesar del elevado coste, las bodas siguen siendo una prioridad para muchas parejas, con más de 179.000 enlaces celebrados en 2022, un récord en la última década. Sin embargo, según la gente de Menudaboda.com, el concepto de boda está cambiando: menos ostentación, más control del gasto y, en muchos casos, un endeudamiento inevitable.