El Arzobispo Carlo Maria Viganò ha instado al director de la CIA bajo la administración de Trump a investigar lo que describe como un complot del Estado Profundo destinado a la eliminación de Benedicto XVI. Esta solicitud surge en un contexto de crecientes tensiones dentro de la Iglesia Católica y teorías sobre influencias externas en sus asuntos internos.
Viganò, conocido por sus críticas abiertas hacia el Papa Francisco y su administración, ha señalado que las reformas que se han implementado en la Iglesia reflejan de manera sospechosa las propuestas contenidas en correos electrónicos filtrados de John Podesta, asesor de Hillary Clinton, ha realizado estas declaraciones en una entrevista publicada por el blog ‘Aldo Maria Valli’. Estas propuestas, según Viganò, apuntaban a una «primavera de la Iglesia», un cambio significativo en la estructura y doctrina católica alteradas por el gobierno del Papa Francisco.
La petición del arzobispo no solo subraya su preocupación por la dirección que está tomando la Iglesia bajo el liderazgo actual, sino que también sugiere una intrincada conspiración que involucra a figuras del poder global, mencionando específicamente a la élite de Davos. Esta referencia al Foro Económico Mundial y sus influyentes participantes insinúa que la remoción de Benedicto XVI podría haber sido orquestada para instalar a un Papa más alineado con agendas globalistas.
Viganò ha expresado su esperanza de que el nuevo director de la CIA esté dispuesto a examinar estas alegaciones, buscando evidencias de una operación coordinada para desestabilizar el Vaticano y colocar en el trono de San Pedro a alguien que sirva a intereses externos. Este llamamiento no solo pone de relieve la polarización dentro de la Iglesia, sino también la intersección entre política global y religión.
Este petición del Arzobispo Viganò añade otra capa de complejidad a la narrativa del Estado Profundo, un término que ha ganado popularidad para describir supuestas redes de influencia que operan detrás de escena en la política y otros ámbitos de poder. Al invocar la intervención de una agencia de inteligencia de Estados Unidos, Viganò vuelve a posicionarse en contra de la deriva tomada por la Iglesia tras la llegada de Bergoglio.
La respuesta a esta petición y las posibles investigaciones que podrían derivarse de ella tendrán sin duda un impacto significativo en la percepción pública de la Iglesia Católica y su autonomía frente a influencias externas. La petición de Viganò no solo busca justicia o claridad sobre los eventos pasados, sino también proteger la integridad de la Iglesia de futuras manipulaciones.
Dios te nos guarde Viganó
Pedir a los que forman parte del nuevo orden mundial que investiguen algo es como pedir al mismo Satanás, todos los que llegan a los gobiernos, la CIA,FBI y todos los servicios de inteligencia forman parte de la misa mafia criminal, Donald Trump, Putin no van a salvar a nadie porque forma parte de la misma mafia a la que pertenece el payaso de Zelenski, todos ellos rinden culto a Satanás y siguen la misma agenda, los masones mienten y dicen verdades mezcladas con mentiras.
Nos parece muy bien.
Os habéis fijado en el doble que utilizan para Bergoglio?…la cosa anda mal para los católicos.