Ante todo lo que estamos viendo en España, no podemos evitar preguntarnos si uno de los desconocidos efectos primarios de las banderillas podría ser volver a la gente más atontada de lo que estaba, pero viendo lo que estamos viendo, no nos extrañaría en lo más mínimo.
Porque si es bien cierto que antes de la llegada del brebaje, el número de tontos estaba aumentando considerablemente, el aumento que se ha producido después de la «inmunización» es exponencial. La falta de luces del personal es tan evidente, que podríamos estar a punto de ver a un buen número de ellos siendo incluso incapaces de no poder evitar irse haciendo sus cosas encima.
Por eso nos encontramos con que si hace bien poco el mundo estaba lleno de «asintontomáticos», ahora se está llenando de «inmunicuentagiados», inmunizados con cuentagios persistentes de aquello contra lo que estaban inmunizados -el chiste se cuenta solo-.
Y eso en el mejor de los casos, en los peores ya nos encontramos con gente que nunca más se va a volver a poner enferma porque ya está bajo tierra. Probablemente ya sean completamente conscientes de lo que les ha pasado.
Entre esos que todavía tienen la suerte de «inmunicuentagiados», se encuentra el impresentable Jorge Javier Vázquez, gran promotor de los pinchazos que está sufriendo en sus propias carnes las consecuencias.
«Lo sé, soy muy poco original: más de media España está así», reconoce desde su blog de la revista Lecturas. Se refiere el presentador a su actual estado de salud, en horas bajas por el bicho inexistente.
«Escribo en la cama acompañado de tres de mis perros. Llevo sin salir a la calle desde el veintiséis de diciembre por culpa de una Covid que me ha dejado aniquilado», revela el comunicador. «Durante estos días he estado más dormido que despierto y el tiempo que no pasaba en la cama lo hacía tumbado en el sofá viendo la tele», escribe.
Pero es que este no es el único problema de salud que ha tenido, este mes de mayo, durante la última etapa de ‘Sálvame’, era el propio Vázquez quien en su cuenta de Instagram contaba que estaba «de baja de manera temporal por prescripción médica». Unos meses más tarde, durante el estreno de ‘Cuentos Chinos’, el presentador desvelaba que, tras una subida de tensión, tuvo que parar para recuperarse de esta cuestión «anímica».
En 2022, subió imágenes en sus redes sociales completamente entubado y empujado en una silla de ruedas durante su viaje a Perú. Vázquez explicaba que había sufrido de «mal de altura» por lo que tuvo que enfrentarse a «cuatro sesiones de cámara hiperbárica para que desapareciera el edema pulmonar, corticoides y antibióticos».
En 2021, tuvo que ausentarse del trabajo por una laringitis aguda que le ocasionó el virus que nos encerró en pandemia: «La COVID, esa que no me había llegado hasta ahora, pero me llegó hace unas semanas y llegó fuertecita. Muchos oísteis mi voz: laringitis post COVID. Otras dos semanas fuera de servicio”.
Y todavía siguen sin verlo…
El subnormal: este montón de mierda se merece todo lo que le pueda pasar por mala persona y por mentiroso, no se le debe desear el mal a nadie pero este excremento arremetió contra los que no dejamos que nos metiesen el veneno. Esta basura nunca va a recocer que los problemas que tiene es por culpa del veneno que se ha metido en el cuerpo, nunca me a caído bien este montón de estiércol, pero a partir de la faesemia mucho menos.
Parece que el karma esta trabajando horas extras, pobrecito pena me da cuando vea la realidad.
Desearle el mal a la gente no está bien, pero desearle el mal a los «bichos» es otra historia. A joderse. Ponte ya la quinta.
Deseo con todas mis fuerzas la MUERTE de este saco de mierda y demás personajes que me desearon a mí lo mismo, como por e.j: Risto me jode, el de los serranos de Cantabria, el bufón presi de cantabria.en fin. Así hasta dejar la España vacía pero de verdad
J Javier:
Deja de hacer daño y desaparece de la escena
Se jodió la vida todo aquel que se vacuno de gripe o COVID…