En las últimas semanas se han producido muchos debates, e incluso ataques, contra todos aquellos que habíamos tomado la decisión de abstenernos en estas elecciones. Cuando alguien toma una decisión de ese tipo lo puede hacer por muchos motivos, y todos ellos deberían ser respetables. Así como quien decide votar al partido que sea, se respeta una decisión personal y punto.
Uno de los motivos de esos ataques han sido debidos a la necesidad de parar a partidos agendistas como PP, PSOE, o Sumar, por lo que la opción, de haber votado, habría sido votar a Vox. Al Vox de Steegmann y de los aplausos a Zelenski. Respetable, también, esa opinión.
Y también se nos ha dicho que el abstenerse no servía de nada. Pues bien, eso no es cierto porque un pequeño pueblo de Soria ha demostrado que la abstención masiva sirve de algo. Noticia de ABC del 30 de mayo de 2023: «Un pueblo de Soria tendrá elecciones en noviembre tras rebelarse contra los candidatos de PP y PSOE». «Ninguno de los 24 vecinos empadronados en el concejo de Villaseca de Arciel acudió a votar el pasado domingo porque los aspirantes eran de fuera».
Es decir, los candidatos que presentaron los dos partidos en ese pueblo no eran de la zona y los vecinos decidieron abstenerse porque los candidatos no eran de la zona. Tal y como se indica en el artículo de ABC, «al darse el ‘vacío’ en las urnas que han forzado los sorianos, la Ley Orgánica de Régimen Electoral General establece que deberán de volver a repetirse las elecciones en el plazo de seis meses».
Sabemos que no es tan fácil una abstención masiva en toda España como en un pueblo tan pequeño, pero que sirva todo esto para demostrar que abstenerse sí puede ser efectivo.