Este personaje, de origen venezolano, se hizo popular en España por haber protagonizado momentos de lo más nauseabundos, mostrándose desnudo a la mínima oportunidad que se le presentara y sobeteando a alguna que otra invitada de las que salían en las horas ya decrépitas del programa de Javier Sardá ‘Crónicas Marcianas’ que estaba llegando a su fin allá por los primeros años del milenio.
A raíz de aquello, este «escritor» y «presentador» ha sido premiado, a lo largo de los últimos años, con programas tanto en la televisión pública (que pagamos con el dinero de los impuestos que nos arrancan de nuestras costillas) como en las cadenas privadas, para colaborar en tertulias, participar en concursos o incluso presentar espacios en horario de máxima audiencia.
Recientemente, Boris Izaguirre era preguntado por un reportero de ‘Europa Press’ sobre la opinión que le merecían los resultados de las últimas elecciones generales celebradas el pasado 23 de julio. El venezolano ha contestado que había sido una elección importante de la sociedad española. Sobre la posibilidad de que pudieran repetirse las elecciones en el mes de diciembre, el venezolano contestó que no creía que eso sucediera «yo creo que no, yo pienso que las cosas van a solucionarse y tenemos que tener paciencia y encontrarán solución». Finalmente, Izaguirre concluye «El bien del país ya ha quedado demostrado. No hemos permitido retroceder en ninguno de los derechos que hemos alcanzado, obre todo personas como yo y personas que formen parte del colectivo que represento».
Hemos insistido en lo de venezolano, pero no de forma peyorativa, ni mucho menos. Hemos insistido porque este personaje vino a España huyendo del comunismo de ese país para al final, seguir votando aquí más de lo mismo. Para seguir votando el comunismo de Yolanda Diaz, socia de Sánchez Castejón y toda la chusma de partidos minoritarios que forman el resto de coaliciones izquierdistas.
Nos parece una actitud del todo insolidaria para con sus compatriotas que las están pasando canutas por no tener qué llevarse de comer, por el hambre y la escasez que están sufriendo bajo el yugo del comunismo imperante. Personas que han venido a España buscándose las lentejas sin olvidarse de sus familiares que siguen en Venezuela. Personas a las que el gobierno chavista de Maduro les dejó sin propiedades ni bienes.
Este narcisista ha demostrado que solo piensa en sí mismo, en su condición sexual y su colectivo, como si otro gobierno les fuera a arrebatar sus «derechos conseguidos». Este personaje va de «intelectual» pero no se preocupa de la economía, de la dictadura sanitaria impuesta por el gobierno socialcomunista (él sufrió un ictus en plena grabación de uno de los programas en los que participaba), de la deriva que lleva nuestro país, algo de lo que nos vienen advirtiendo muchos venezolanos que residen aquí «así empezó todo allá y mira como terminamos» nos repiten hasta la saciedad.
Lamentable Boris Izaguirre, el venezolano. Menudo ejemplo para sus compatriotas.
Boris no se entera de que el golpe de estado electoral del pasado 23 de julio (no se han sumado los votos en el escrutinio general y se ha aceptado el resultado que dice haber obtenido opacamente la sospechosísima Indra) lleva a España al mismo lugar al que fue llevada Venezuela. O es bobo o es un globalista traidor.